En el marco del anuncio del gobierno de finalizar el programa Potenciar Trabajo y reemplazarlo por otros dos llamados Volver al Trabajo y Acompañamiento Social, la referente nacional de Libres del Sur Silvia Saravia dialogó con El Termómetro y sostuvo que “el gobierno busca recortar partidas de donde sea y no está pensando que la gente vuelva al trabajo”.
«Una primera visión es que las cosas no cambian por cambiarle el nombre o que mágicamente las personas van a acceder a un empleo por un anuncio. Esto ya lo vivimos, ya nos pasó, asume un gobierno u otro y cada uno pone en eje que el problema son los programas sociales y el problema es la crisis que estamos atravesando, la recesión, buscan correr el eje de las consecuencias gravísimas de las decisiones que toman, que castigan y ponen en situación de más vulnerabilidad o incertidumbre a las personas que peor la están pasando en nuestro país», enfatizó.
En esa línea sostuvo que «el gobierno lo que está planteando es recortar partidas de donde sea y no está pensando que la gente vuelva al trabajo» y señaló que «en 2002 había más de 2 millones de planes sociales, que era el jefas y jefes de hogar y se pensó como se recuperaba el trabajo, no como se cambiaba el plan».
Además aseguró que «la gente no quiere vivir de un plan social, eso es un mito» y que «como en otros temas buscan correr el eje, si se generan trabajos genuinos con ingresos para vivir dignamente la gente va a irse del plan social».
«El problema del gobierno anterior y que este profundiza es que no se generan los puestos de trabajo. En ésta situación el comercio va a despedir un montón de gente, la construcción está despidiendo gente, ese es el grave problema que estamos atravesando», añadió.
Asimismo recalcó que «no hay ningún tipo de certeza de que van a hacer esta tarea que dicen, si no lograron entregar un kilo de alimento, sino fueron capaces ni de designar a los funcionarios que tienen que firmar los expedientes».
Saravia también insistió en que creen que «detrás del relato mediático está la decisión de hacer recortes como sea» y que «hay una cuestión de ensañamiento». «Creo que no entregar alimentos es una decisión política. La tarjeta Alimentar no resuelve la situación de los comedores, porque la tienen solo los que tienen asignación universal», sumó.
Y agregó: «Yo veo un aumento del conflicto en distintos niveles, hay una situación de incremento de violencia entre pares, hay distintos planos, pero contra las medidas del gobierno va a haber también conflicto organizado, la recesión trae cierre de pymes, eso ya lo hemos visto, cierre de comercios, va a haber conflictividad social en los diferentes planos”.
En ese contexto consideró que “el 8 de marzo y el 24 van a ser hechos importantes” en referencia a las marchas del 8M y por el aniversario del último golpe. “Va a haber repudio a ésta agresividad, la agresividad en la dirigencia trae consecuencias. Hay un presidente desbocado, enemistados con todos, agresivo, y con una postura jodida con su comunidad. Nosotros tenemos tratar de buscar la contención, hacer los reclamos de manera pacífica y buscar la solidaridad y empatía entre distintos sectores, no tiene que ser una guerra entre nosotros”, concluyó.