(Por Christian Skrilec)
El Presidente Javier Milei quedó desnudo y a la intemperie de la realidad. Lo que ocurrió con la estafa de la criptomoneda $LIBRA acarreará consecuencias en todos los ámbitos, aunque probablemente no las que espera la ilusión opositora. El aparto comunicacional del gobierno, sus seguidores incondicionales que no hayan sufrido pérdidas en sus ahorros y la mayoría de la población poco informada serán suficientes para que este gravísimo incidente no termine en una catástrofe política.
No obstante, el problema para el “mileismo” es definitivo, el Presidente, en el mejor de los casos, quedó atrapado en su torpeza e ignorancia.
Para los distraídos del mundo, simplemente recordar que Milei promocionó oficialmente una criptomoneda que llegó a concentrar 4 mil millones de dólares en inversiones y en pocas horas se derrumbó a menos que cero, lo que permitió que algunos de sus creadores ganaran por lo menos 80 millones de dólares en unas horas, perjudicando a miles de inversores.
En este contexto, el primer problema que enfrentan los seguidores incondicionales del Presidente es el siguiente: si Milei es el genio económico y financiero que dice ser, acompañado por el mejor gobierno de la historia, él y algunos actores de su gobierno son también parte de la estafa, esto es, son estafadores y ladrones. Ahora bien, si no son estafadores y son inocentes de toda culpa, son inevitablemente torpes e ignorantes. Todas las variables intermedias se desdibujan.
La relación de Milei con los creadores de esta cripto-estafa y otros protagonistas del mundo económico tecnológico vinculados a la misma está probada. Lo que será muy difícil de establecer es la participación del propio Presidente en la estafa, más allá de su publicación en la red X que la hizo posible. Y aquí volvemos al problema inicial, la única excusa que lo salva es la ignorancia y la torpeza.
El segundo problema, que es una oportunidad inesperada para una oposición moribunda, es que esa torpeza e ignorancia que lo vuelve inocente, se puede trasladar a muchas de sus afirmaciones cuestionables que son defendidas a capa y espada por sus adalides y seguidores. El incidente cripto es un argumento formidable para sacudir las bases de credibilidad del Presidente Milei, fundamentalmente porque ha hecho que centenares de personas perdieran ahorros.
Tengo para mí que la torpeza y la ignorancia, también fueron los principales propulsores de otras afirmaciones disparatadas del presidente. Desde la inflación heredada “corriendo al 15 mil por ciento anual” al principio de su gobierno a la “deflación en dólares” de la semana pasada, desde la penosa “zurdos los vamos a ir a buscar” hasta su insistencia en relacionar la homosexualidad con la pedofilia. Obviamente, que en estos casos logró relativizar la torpeza gracias el esfuerzo denodado de todos aquellos que lo quieren y necesitan para gobernar, para hacer negocios y para implantar sus ideales sociales, económicos y culturales.
Milei quedó desnudo y esta vez será más difícil arroparlo, y tal vez, este yerro mayúsculo lo exponga de manera tal como para que las mayorías empiecen a dudar del “mejor gobierno de la historia”.
Gracias por leer.