(Por Christian Skrilec)
Es evidente que la policía bonaerense destinada en Quilmes y el gobierno Municipal de Mayra Mendoza no se están entendiendo. Si bien es rigurosamente cierto que la inseguridad aparece al tope de las preocupaciones en todos los distritos del conurbano, en el caso particular de Quilmes, la policía no solo ha mostrado un actitud de excesiva pasividad, sino que además se excusa permanentemente de tener una actitud vigilante y preventiva.
Todo quedó expuesto un mes atrás con dos hechos lamentables. Los asesinatos de un joven de 20 años en Solano y de un pibe de 18 años en Ezpeleta que intentó evitar una entradera, ambos casos fueron decisivos para que el gobierno comunal rompiera el silencio y tomara la iniciativa para exhibir que “la bonaerense” no tiene más excusas para combatir el delito en el distrito.
Militando la excusa
Una familiar directa del joven asesinado en el oeste de la ciudad se presentó una hora después del hecho a la Comisaría 4 de San Francisco Solano, reclamando el accionar policial inmediato ya que había testigos del hecho y que los perpetradores habían sido identificados. Desde la repartición le informaron que “no tenían nafta para moverse” y que “no había móviles disponibles desde el comando”.
Apenas unos días antes del crimen del chico de Ezpeleta, los vecinos de la zona se habían reunido para reclamar seguridad, en dicha reunión, efectivos de la Comisaría 6 le informaron a los vecinos que no podían patrullar la zona por falta de recursos. Que el justificado reclamo de justicia por el asesinato tuviera entre sus destinatarios al Municipio por no darle recursos a la policía, no fue casualidad.
Días después de estos sucesos, a través de la red social Tweeter, el secretario de Seguridad Gaspar De Stefano afirmó que “la municipalidad de Quilmes aporta el combustible necesario para todos los móviles policiales. Si un efectivo rehúsa cumplir con sus funciones so pretexto de no contar con combustible, denúncialo a seguridadciudadana@quilmes.gov.ar”.
El tweet acompañó las declaraciones públicas de la intendenta Mendoza en la Apertura de Sesiones del HCD, donde aseguró que se destinaban más de 5 millones de pesos mensuales en combustible para los patrulleros de Quilmes.
La bonaerense milita la excusa, en lo que va del mes hubo más de una docena de reuniones de vecinos auto convocados para reclamar por la inseguridad en distintos barrios, en casi todas ellas, se acercó un móvil policial dependiente de la comisaría del lugar, las excusas de los efectivos se repite como una letanía: no hay móviles, no tenemos nafta, nos faltan efectivos, el municipio no hace nada.
Hay una anécdota que cierra este capítulo de manera contundente. Un par de semanas atrás, se desató una disputa de cuida coches en la plaza Conesa del centro de Quilmes. Una vecina que pasaba por lugar, ante los primeros escarceos entre los trapitos, le pidió a un policía que intervenga para que la pelea no pase a mayores, el efectivo respondió con contundencia: “No nos podemos meter, los trapitos son de Mayra, la Intendenta”. Resultó que la vecina tenía un conocido en el gobierno municipal, que tomado nota del asunto, exigió el sumario del policía.
La paradoja de la inversión en seguridad
Paradojamente a la exacerbada situación de inseguridad que se vive en el conurbano, estamos en un tiempo donde las inversiones en seguridad se multiplicaron en la Provincia. Después de la quita de fondos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires conflicto policial de por medio, los fondos llegaron a los Municipios. Solo en Quilmes se adquirieron más de 160 móviles policiales, se colocaron más de un centenar de alarmas comunitarias, se pusieron en funcionamiento unas 250 nuevas cámaras de seguridad, y se subió el aporte de combustible a volúmenes inéditos en el municipio, entre otras afectaciones presupuestarias.
Sin embargo, esa inversión sin precedentes en un período tan corto de gestión no se ve reflejado en el día a día y la inseguridad crece. La presencia de los nuevos móviles municipales no logran la prevención deseada y los nuevos patrulleros no se ven lo suficiente.
En los foros, las redes sociales y las cadenas de WhatsApp de los vecinos, la queja por la falta de presencia policial es un denominador común inobjetable.
El Municipio también se equivoca
Es cierto que a partir de la gestión Berni en el ministerio de Seguridad, los intendentes perdieron influencia y poder sobre las reparticiones policiales de la bonaerense que tienen sede en sus distritos. Las quejas al respecto de intendentes como Juan José Mussi (Berazategui) y Andrés Watson (Varela), por citar apenas dos mandatarios con muchos años de experiencia en la región, trascienden el off de record con el objetivo de llegar a los oídos del gobernador Kicillof.
Pero esa falta de influencia no impide que se activen ciertas medidas para contrarrestar la desidia policial. Conocida por el gobierno municipal la “militancia de la excusa”, debería confrontarla. Si bien se conoció oficialmente que el municipio realizó más de 70 reuniones con vecinos por el tema inseguridad, los funcionarios no aparecen en los momentos calientes del reclamo, donde la policía si lo hace y se excusa aduciendo la falta de medios. El municipio no ha confrontado la excusa, tal vez, imaginando que su presencia podría ser reactiva en una protesta vecinal, pero está evidenciado que está resultando peor la ausencia.
Por otra parte, desde el primer día generó polémicas la designación de Gaspar De Stefano como Secretario de Seguridad. De Stefano es un abogado con experiencia en los Tribunales de Quilmes, que tiene vinculaciones que el sector judicial pero no con la policía, y que tampoco habla el particular lenguaje con el que podría entenderse con “la bonaerense”.
Adjudicar el problema de la inseguridad local a De Stefano es exagerado, pero responsabilizarlo por no haber podido alinear las necesidades en política de seguridad que tiene el Municipio con el accionar de la policía, además de adecuado es obvio.
El reclamo de la Intendenta
Ante el panorama actual, la Intendenta Mendoza apostó por jugar públicamente. En la Apertura de Sesiones del HCD, ante la mirada del poder político de la Provincia (estaban presentes la vicegobernadora Verónica Magario, el jefe de Gabinete Carlos Bianco y la ministra de Gobierno Teresa García), le pidió “a los más de mil agentes de la policía bonaerense que se desempeñan en nuestra ciudad más presencia en la calle y mayor nivel de compromiso”.
En declaraciones radiales posteriores, Mayra resumió que “El municipio invirtió en seguridad, ahora la policía y el poder judicial deben hacer lo suyo”. Más evidencia imposible.
En cada referencia a la inseguridad, la Intendenta también hace referencia a la Justicia, pero para hablar de la histórica y endémica ineficacia del Poder Judicial de Quilmes en materia penal, se necesita otra nota.
Conclusión
La pregunta está planteada, ¿la policía bonaerense está en contra de la gestión Mendoza? Lo descripto con antelación nos invita a dar una respuesta positiva aunque no definitiva. La policía bonaerense nos tiene acostumbrados a tener más vocación por asociarse al delito, por minimizarlo y relativizarlo, que por combatirlo. ¿Hay razones políticas para que la policía de Quilmes tenga una posición excesivamente pasiva ante la inseguridad? ¿Las fuerzas de seguridad locales tienen perjuicios ideológicos con la conducción Municipal?
En las últimas horas trascendieron los cambios de autoridades en la Estación Policial Quilmes y en la Comisaría 1, y se esperan más cambios para los próximos días. El gobierno le pidió a los integrantes del área de Seguridad que den la cara y acompañen a los vecinos, área que también tendría cambios en su plantel de sus funcionarios. Son datos alentadores, pero si no se responden las preguntas precedentes, difícilmente alcance para satisfacer el reclamo de los vecinos.
Gracias por leer.
A ESTA MUJER QUILMES LE QUEDA GRANDE, ESTA DEMOSTRANDO QUE ES IMPRESENTABLE !!
lo unico que sabemos que quilmes esta azotada por la pandemia de la inseguridad en primer lugar
con respecto a los trapitos dicen que responden a grabois por eso participa tanto en distintas decisiones del municipio sin ser funcionario
debido a la inseguridad la intendente lo unico que emplea como herramienta es la foto con la victima o los familiares
es notable la falta de interes total que tiene sobre el municipio creo que esta intendencia la usa como plataforma para aspirar algo mas en su carrera politica
quilmes no le importa
inseguridad total quilmes este y oeste sumada la estacion basta de permitir vagancias,incrementa malaeducacion e inseguridad basta dicen vecinos eduquen gente y denles otro labor.