Esta semana será clave para Axel Kicillof, ya que espera que se defina en la legislatura de la provincia de Buenos Aires la suspensión de las PASO como ya ocurrió a nivel nacional y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La fecha para el tratamiento de los diferentes proyectos es el jueves 27.
El clima quedó tenso en la legislatura la semana pasada cuando se llevó adelante la sesión pedida por La Libertad Avanza para tratar los diferentes proyectos que hay para suspender las PASO y bajaron al recinto ocho de los once legisladores que están alineados con el gobernador, aunque no se llegó al quórum necesario y se sesionó en minoría.
La foto de partición del bloque sumó ruido a la interna peronista, no obstante, todo parece indicar que este jueves finalmente diputados estaría dando media sanción a la suspensión. El ejecutivo pretende que se trate el proyecto que presentaron los legisladores kicillofistas la semana pasada donde se agregan nuevos plazos electorales como había pedido el ministro de Gobierno, Carlos Bianco. Hasta ese momento se planeaba tratar el proyecto presentado por el massista, Rubén Eslaiman.
En la semana se verá si el proyecto logra pasar por las tres comisiones correspondientes para obtener despacho y que el mismo pueda ser aprobado con mayoría simple en la Cámara o si no logrará esa instancia y el oficialismo deba conseguir dos tercios de los votos para darle media sanción.
Las reuniones cruzadas que se desarrollen en estos días serán claves para definir cómo se definirán diferentes cuestiones, el massismo y La Cámpora venía reclamando que se discuta el combo electoral completo al interior del peronismo y no tratar las PASO de forma aislada. Las charlas están, hace algunos días hubo una reunión entre Kicillof y Máximo Kirchner, fue antes de la sesión fallida de la semana pasada.
Si efectivamente se suspenden por este año las PASO en la legislatura -el proyecto deberá pasar también por el Senado- Kicillof tendrá el camino allanado para avanzar en el desdoblamiento electoral, algo que en su entorno dan por descontado pese al desacuerdo de Cristina Fernández de Kirchner.