Luego de un mes de juicio, el Tribunal Oral de Dolores dio a conocer la sentencia para los ocho acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa en Villa Gesell en el 2020 y condenó a prisión perpetua a cinco de ellos, mientras que los otros tres imputados recibieron 15 años.
Por el delito de «homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas», Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Ciro y Luciano Pertossi recibieron la condena de prisión perpetua.
En tanto, los otros tres imputados, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi, recibieron 15 años de prisión por ser “partícipes secundarios” del asesinato de Fernando.
La lectura del veredicto se dio pasada las 13:30 con los ocho imputados presentes. Tras conocerse la sentencia, Thomsen se descompensó y las autoridades pidieron desalojar el tribunal para leer las últimas líneas del veredicto. El resto de los jóvenes condenados recibieron la sentencia de pie.
Luego de la decisión unánime de los magistrados María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari, las partes pueden presentar una apelación en Casación.
Minutos antes del fallo, Graciela Sosa, la madre de Fernando, dialogó con los medios y subrayó: “Por fin llegó el momento de la sentencia, estamos fuertes y confiando que se va a hacer justicia por Fernando, vinimos con la esperanza de conseguir justicia para que pueda descansar en paz. Justicia para mí es que le den perpetua a todos los asesinos”.
Tras conocerse la sentencia, el abogado de la familia del joven asesinado, Fernando Burlando, aseguró que apelaran el fallo porque no entienden «cómo a estas tres personas (Viollaz, Cinalli y Lucas Pertossi) las benefician con la participación secundaria». En esa sintonía, Silvino Báez, padre de la víctima, sostuvo que le quedó una «sensación agridulce» por la diferenciación entre los condenados.