Nuevamente un concejal del Frente de Todos de Quilmes renuncia a la banca, sumando así a una situación inédita en la historia política de la ciudad. Hasta la actual gestión nunca se había dado tal cantidad de concejales que ante diferencias políticas o personales decide en vez de conformar otro bloque o pedir licencia en el cargo, renunciar.
Este miércoles se confirmó que el concejal Sebastián Majo, quién ingresó al HCD en la elección de 2021 en el sexto lugar presentaría formalmente su renuncia por motivos políticos y personales. Su reemplazo aún no está definido. Si habría que seguir la lista de concejales sin que ningún concejal de licencia con cargo en el ejecutivo volviera al Concejo Deliberante, quién debería llegar a la banca es la primera concejala suplente, Rosalina Mendoza. Sin embargo, eso está en duda. Mendoza proviene del movimiento social Barrios de Pie. Entre las opciones toma fuerza la vuelta al HCD de Belén Marón, quién está de licencia y actualmente ocupa la dirección General de la secretaría de Género.
La renuncia de Majo está envuelta en una ola de rumores que van desde problemas personales, reclamos en el Concejo Deliberante, pedidos de contratos y disputas con el funcionario Ignacio «Nacho» Castro por el Programa Potenciar Trabajo, entre otras combinaciones. Majo le planteó oportunamente a su entorno que sólo iba a pedir licencia y no renunciar, pero como quedó evidenciado, terminó cediendo.
La seguidilla de renuncias a las bancas la inauguró el ex concejal Ariel “Lula” Gómez, quién se fue por diferencias políticas con la conducción distrital y terminó luego trabajando con el ex intendente Martiniano Molina en Juntos por el Cambio.
A la banca también renunciaron otros referentes como Susana Cano, también por motivos políticos, para desembarcar luego en un cargo en el ministerio de Seguridad nacional a cargo de Aníbal Fernández. En diferentes circunstancias renunciaron también el actual funcionario Rubén Elías y el defensor Adjunto del Pueblo, Ángel García. El caso del primero llama la atención ya que el resto de los concejales que asumieron un cargo ejecutivo tomaron licencia y no renunciaron a la banca, el segundo está justificado en que el cargo que hoy García ocupa es incompatible con el de concejal.
Pero más allá de las renuncias, la relación tensa entre los concejales y el ejecutivo municipal se dio en otros casos, como el del ex concejal Diego Méndez, quién en el último tiempo de su mandato prácticamente no concurría al HCD y desde que dejó la banca se alejó definitivamente del espacio e incluso de la política. Otro caso es el de la concejal Laura González, quién por tironeos internos constantemente deja el bloque de concejales y luego vuelve, o pide licencia.
Todos los concejales de la lista ya asumieron, una vergüenza, aunque es simple o estás en las digas de la intendente ( campora) o no serás nada, ansío el 2023 y espero dejen que haya internas. Estamos en democracia