La referente de MuMaLá Maia Luna dialogó con El Termómetro con motivo del 8M y detalló algunos datos que arrojó el último informe elaborado por su observatorio respecto de los femicidios que se cometieron en el país en lo que va del año.
“No todas las violencias son lo mismo, pero son violencias. Este observatorio que llevamos adelante es una herramienta porque faltan datos oficiales, todavía no es prioridad en la agenda del gobierno”, expresó y puntualizó que al 27 de febrero “se cometieron 43 femicidios, lo que representa uno cada 32 horas y hubo 62 intentos de femicidios”.
Además, explicó que “el informe se elabora con los datos de los medios de comunicación y muchos casos no llegan” y que “se agregó en el estudio el intento de femicidio en el último tiempo porque la mujer se salvó pero podría haber terminado en la misma situación”.
Según el informe, además de esos 43 femicidios, hubo diez muertes violentas asociadas al género, vinculadas a economías delictivas o colaterales, nueve muertes violentas de mujeres están en proceso de investigación y tres suicidios femicidas.
“52 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madre. Seis de cada diez de los femicidios son por parejas o ex parejas y siete de cada diez son cometidos en el hogar”, añadió Luna y afirmó que “durante la pandemia el quedate en tu casa fue un problema mayor”.
En esa línea, agregó: “Aún hoy seguimos teniendo los mismos reclamos, el número de femicidios no bajó. La deuda es con nosotras, no nos podemos desligar de lo que pasa en el mundo y en nuestro país. Primero se tienen que atender las deudas con nuestro pueblo y no la deuda ilegal de la que no vimos un centavo. El posicionamiento es político claramente”.
También desde el informe se desprende que el 58 por ciento de las mujeres fueron asesinadas con arma blanca, la edad promedio de las víctimas es de 36 años, el 20 por ciento de las víctimas de femicidios había denunciado a su agresor y de ese porcentaje el 80 tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 10 además botón antipánico y que el 6 por ciento de los femicidios fue cometido por personas de las fuerzas de seguridad.
“Tengo la responsabilidad militante que si bien fuimos de las primeras en felicitar la creación del Ministerio de las Mujeres y las Diversidades, lo cierto es que ha quedado mucho a mitad de camino de lo que se dijo que se iba a hacer, a la hora de resolver las cuestiones concretas de violencias se quedan a mitad de camino. Reclamamos constantemente por cuestiones básicas o burocráticas”, enfatizó.
Y añadió: “No vamos a decir que el ministerio no tiene que existir, pero si tiene que funcionar de otra manera, no quedarse en el relato y que si es una prioridad del gobierno se tiene que materializar. Muchas cosas tienen que ver con el presupuesto pero muchas también con decisiones políticas”.
“Se necesita un cambio cultural muy grande, el machismo está impregnado. Va a llevar mucho tiempo pero ahí estaremos para que un día podamos dejar de contar la cantidad de femicidios y contar derechos conquistados”, concluyó.