El Encuentro Memoria Verdad y Justicia, integrado por espacios de izquierda, organizaciones sociales y sindicales encabeza hoy una de las columnas en la movilización a 46 años del último golpe militar. El dirigente del Nuevo MAS, Luis Di Barloto hizo un análisis del proceso y consideró que «La Dictadura vino a parar el ascenso de una sociedad más justa, vino a instalar el individualismo».
En diálogo con El Termómetro, el dirigente quilmeño contó que la columna llegará a Plaza de Mayo alrededor del mediodía. Allí se va a leer un documento en conmemoración de los 46 y repudiando y exigiendo justicia para que «este Nunca Más sea una bandera colectiva de la sociedad argentina y que no tengan asidero estas voces que tienden a reivindicar cuestiones de la dictadura».
«En la argentina no hay lugar para la dictadura», sostuvo Di Bartolo y consultado sobre la apropiación partidaria de la marcha entiende que «la marcha es política porque el contenido es político mas allá de dentro de que espacio cada uno marche, o aunque vaya solo».
Así agregó: «Cada uno marcha dentro de su espacio, pero en todas las marchas, al menos las del último tiempo, hemos coexistido, es un acto de masas que trasciende. El que quiere arrogarse la marcha se equivoca, esto va mas allá en de la sociedad argentina en su conjunto».
En ese sentido aclaró que desde la izquierda «vamos con la consigna histórica pero que también tiene un basamento con la realidad actual» y en un análisis del Proceso Militar, entiende que «la dictadura vino a romper con la construcción de una sociedad mas justa, a instalar el individualismo, a romper con derechos, sociales, económicos».
«Hoy en un contexto diferente y con un gobierno democrático, el gobierno firmó un acuerdo con el FMI que va a traer un ajuste. Tenemos una inflación que va escalando y supera todas las previsiones, y en un contexto diferente vemos que trabajadores, la juventud ve esto con mucha preocupación», manifestó el dirigente del Nuevo MAS y cerró: «Pedimos nunca mas, pero también nunca mas el ajuste y os acuerdos con estos organismos con el FMI tomados de manera fraudulenta que después pagamos todos».