Violencia de género: reclaman justicia por la muerte de Daiana Fontes

La familia y amigos de Daina Fontes se movilizará a los tribunales penales de Quilmes este miércoles a las 10 de la mañana para reclamar justicia por su muerte el pasado 18 de julio cuando fue encontrada sin vida en su domicilio en medio de una situación constante de violencia de género por parte de su pareja y padre de sus hijos de 8 y 5 años Francisco Ariel Alegre. La causa la tiene la UFI 3, a cargo del Fiscal de instrucción Conde.

“Mi hija fue víctima de violencia de género hasta su último suspiro, y a pesar de la gravedad de los hechos que padeció jamás obtuvo justicia, jamás se cumplieron las medidas de protección expedidas para ella y que son extensivas a sus hijos, mis nietos de 8 y 5 años por el riesgo permanente en el que viven”, publicó su madre al convocar a la movilización.

En diálogo con El Termómetro, Ileana Lingua, quien es una de las referentes de la ONG La Julieta y quién la acompañó y asesoró en las semanas previas a su fallecimiento relató los hechos y marcó sus dudas respecto de su fallecimiento que, en principio se investiga como un suicidio.

“Es una posibilidad, pero al momento no tenemos claro algunas cosas, a mi me genera mas preguntas que respuestas la situación de Daiana, ni yo, ni la defensora ni el fiscal valoramos a Daiana como una persona que podría llegar a este lugar, me puedo equivocar pero el fiscal había hablado con ella en la semana, le había pasado información pro whatsApp, había comprado pasajes para irse afuera por si todo fracasaba”, afirmó sobre las circunstancias de su muerte.

Lingual relató lo que Daiana vivió el último tiempo: “Lo que ella padecía es brutal, tiene una historia de violencia relatado por cada miembro de su familia, cuando decide terminar la relación, luego de dos intentos en 2023, a poco tiempo que lo logra denuncia la violencia de genero, con medidas de protección vigente este hombre la va a buscar a la puerta del colegio del nene, se baja de un auto y la empieza a apuñalar con un destornillador, ella tenia demasiada ropa y no logra el objetivo pese a los cuatro o cinco intentos, intervienen trabajadores lo golpean con una pala y así logran sacárselo de encima. Ahí arranca la primera instancia judicial, fue un trabajo muy bien hecho y eleva esas actuación como grave tentativa a juicio ahí pasa a manos de otro fiscal y empiezan los problemas. Le propone bajarlo a lesiones leves y termina en un juicio abreviado, el tipo nunca dejó de hostigarla,

ella no fue acompañada por ningún organismo, no sabia que había defensoras oficiales que la podían acompañar en ese proceso, a él le terminan dando una sentencia aberrante de un año y dos meses por lesiones leves y ahí empieza un derrotero sin fin , el viola permanentemente las medidas”.

Lingua cuenta que Daiana llega a ella en junio “con una situación incendiada”. “Llamo a la fiscalía de violencia, era imposible de creer que todo de forma tan brutal había fracasado, la UFI 10 empezó a arrancar como tenia que hacerlo, pero la justicia resolvió algunas cuestiones por la vía civil y penal, que se caiga la libertad condicional por violar las medidas de protección, el 12 de julio el tribunal se fue de vacaciones y no emitió una resolución. El está en la calle, con el agravante que la pareja anterior también lo denunció por violencia, con dos hijos que no tienen vinculo, sobraban antecedentes, este caso nunca me termina de sorprender y se va a seguir complejizando porque esta mujer y Daiana no son las únicas víctimas”, afirmó.

Según explicó la situación judicial es compleja ya que al hombre “no lo pueden condenar dos veces por un mismo hecho”, pero sí se puede buscar otros caminos. “Lo primero son las medidas de protección para los niños, lo segundo que esté detenido”, aseguró sobre los pasos a seguir.

“La familia esta pidiendo que haya justicia para Daiana, por eso busca que se cambie el fiscal en la causa por los causales de muerte porque no tiene perspectiva de género, y podemos plantear esto por que en estos tipos de casos de una mujer hostigada al final si incluso se había suicidado, la perspectiva de género tiene que estar, ella no tenia un problema de salud mental, sino que era tratada por la violencia de género”, explicó e insistió: “Para tres personas que hemos asistido a mucha gente en esta situación no hay un correlato, no se veía un riesgo potencial. Yo me puedo equivocar, la defensora se puede equivocar, el fiscal adjunto se puede equivocar, pero los tres juntos es un montón”, cerró sobre la hipótesis del suicidio.