El pasado viernes, en la última sesión del Concejo Deliberante de Lanús, el oficialismo de Juntos quiso tratar sobre tablas un proyecto de resolución que pide al Gobierno Nacional que arbitre las medidas necesarias para facilitar el acceso de los clubes de barrio a la tarifa social de los servicios. La iniciativa cayó mal en el peronismo local porque entienden que les «robaron el discurso». El PRO habló de tarifazo e inacción por parte del Gobierno, lo mismo que el Frente de Todos denunció de la gestión de Mauricio Macri. Desde el Frente de Clubes de Barrio, el ex concejal Daniel Dragoni consideró la propuesta «una fantochada» y aseguró que hoy «las instituciones, si fuese solo por lo que hace el Municipio, estarían en condiciones paupérrimas».
El hombre del Frente Transversal dialogó con El Termómetro por el debate trajo Juntos y que dio en la línea argumentativa del kirchnerismo: «El proyecto de Juntos no es más que una fantochada. Al estar la Ley nacional de Clubes de Barrio, la 27.098, la tarifa social está incluida ahí. No necesita una ordenanza del Concejo Deliberante».
Para el ex concejal: «No hace falta que los concejales del PRO que fueron parte del Gobierno que más perjudicó a los clubes de barrio, parece ilógico que salgan a hablar de esto, pero bueno, todo tiene sentido en la política. No se le puede creer nada de lo que dicen después de conocer los hechos que durante cuatro años cerraron clubes, los tomaron y nunca los ayudaron».
Consultado por el anuncio del fin de semana de la secretaría de Energía de la Nación, Flavia Royon, que los clubes de barrios «mantendrán los subsidios en la energía», en base a la ley nacional, Dragoni considera que, a pesar de lo que denunciaron desde el PRO «nunca hubo tarifazo. En ningún momento se habló que los clubes iban a estar dentro de la quita de subsidio». y aclaró que, además «la Ley de Asociaciones Civiles lo prohíbe en la Provincia de Buenos Aires, por ejemplo»
«Creo que se adelantaron, creo que el viernes no tenían nada que tratar y metieron esto», sostuvo sobre el intento de tratarlo sobre tablas, el pasado viernes, y se mostró extrañado que exista una iniciativa así «porque hay una ley. La pidió Omar López, que fue presidente de una liga; mismo el secretario de Educación, Empleo y Deporte (Damián) Sala debería saber que hay una ley».
Dragoni es parte del armado del Frente de Clubes de barrio, un espacio que se formó durante la pandemia para buscar ayudar desde el Gobierno Nacional y Provincial, y que hoy nuclea 32 instituciones. En el análisis que hacen, desde el espacio, «la situación de los clubes si fuese solo por el Municipio es paupérrima. Solo 9 o 10 clubes recibieron recursos del fondo especial que se cobraba con la tasa de servicios generales. Y nunca explicaron cómo la distribuyen. Si fuese por el oficialismo hoy los clubes estarían deteriorados».
Por otro lado, destacó la ayuda que llega con programas «Clubes a la Obra», durante la pandemia, y contó que «cuando se arrancó la conversación con el Frente de Clubes, formamos un grupo de unas 32 instituciones, y desde el Gobierno Nacional se le bajó un subsidio de un millón de pesos a cada uno de los clubes que se anotaron en el Frente cuando lanzamos la convocatoria para arreglos y obras, que tenía que ver con chapas, alambrados, cemento, pintura entre otras cosas. Intentamos ser abierto, hablamos con todos los clubes, entendemos que fue por la pandemia, pero eso ya se entregó todo por parte de la subsecretaría de Obras Públicas, que conduce Edgardo Depetri».