Tras varios meses de reclamos, luego de haber sido despedidos, los ex trabajadores de EMA/ Edesur, reclaman hoy al Gobierno nacional que les habilite la cooperativa que gestionaron para poder volver a trabajar. Aseguran que el INAES y el Ministerio de Trabajo no le mandan los fondos y que su documentación se encuentra dormida en AFIP sin avanzar. Plantean que «la precarización es una política del Gobierno y las patronales para reventar los salarios».
Son ex trabajadores de la empresa EMA que terceriza tareas para la prestadora del servicio eléctrico, Edesur, en el conurbano. Fueron despedidos hace más de un año, en plena pandemia de coronavirus y en el marco de un proceso desinversión por parte de la empresa italiana. Hoy aseguran que buscan querer volver a trabajar pero que la traba hoy se las pone el Estado.
El vocero de los despedidos, Julio Sergio explicó: «salimos a buscar trabajo todos los días, es lo que queremos desde el principio. Pero estamos inhibidos por estas empresas que contratan trabajadores de manera precarizada y cuando reclamamos por nuestro justo derecho ya sea a que se regularice nuestra situación por el encuadramiento gremial correspondiente, el salario de miseria que nos pagan o la forma de contratarnos, nos despiden y persiguen hasta estar seguros de habernos cortado toda posibilidad de obtener una fuente laboral digna para nuestras familias».
«Esto es un ataque a todos los trabajadores, porque la precarización es una política del gobierno y de las patronales para reventar las condiciones del salario, de los convenios colectivos y lleva a que cada vez más compañeros vivan en la miseria o trabajen más horas para obtener cada vez menos a cambio. Así, también sufrimos la pérdida de compañeros por electrocución, debido a la falta de elementos de seguridad que la patronal se ahorra, importándoles únicamente sus ganancias por sobre nuestras vidas», agregó.
Y, en este contexto explicó la situación en la que hoy se encuentra con el Gobierno Nacional por el que buscan que le habiliten su cooperativa para poder tener una herramientas alternativa de trabajo: «Hemos hecho los trámites para la cooperativa hace ya cuatro meses y no nos habilitan los fondos desde el INAES y el Ministerio de Trabajo de la Nación. Nos prometieron que podríamos tener las herramientas para poder trabajar, que nos iban a facilitar un contador y gente capacitada para ayudarnos a organizar la parte administrativa de la cooperativa».
«Hoy en día estamos poniendo dinero de nuestros bolsillos para realizar los trámites en AFIP e informar que la cooperativa se encuentra paralizada porque los fondos para su funcionamiento no son más que promesas y maniobras, mientras los trabajadores con nuestras familias no conseguimos trabajo genuino ni podemos poner en marcha el proyecto», cerró Sergio.