El secretario de Educación, Culturas y Deportes del Municipio, ex rector de la Universidad de Quilmes y virólogo, Mario Lozano, dialogó con El Termómetro sobre la situación actual de la pandemia, la vacunación y la vuelta a clases.
Consultado sobre la baja cantidad de personas que se inscribió hasta el momento para recibir la vacuna, el funcionario consideró que la campaña de vacunación recién está empezando, que hay cierta reticencia y desconocimiento, pero que con la campaña apenas iniciada más de un millón de personas inscriptas no está mal.
“Los que se anotan en general son los que más preocupados están, los adultos de más de 70 años, el personal de salud, yo veo mucha desinformación sobre la importancia de la vacuna, hay una guerra mediática solapada pero evidente sobre la Sputnik V. Es importante que sepamos que no existen las tecnologías de salud 100% seguras, y las vacunas en particular nos perturban porque se aplican a personas sanas, distinto a medicamentos que se aplican a personas que tienen una patología y están sufriendo. En el caso de la vacuna el beneficio es más abstracto” explicó al tiempo que afirmó que “la clave es la prevención y la solidaridad” ya que se necesita a la mayor cantidad de gente vacunada para que el virus no circule. En ese marco destacó que Quilmes es uno de los distritos en el que más gente se inscribió.
Sobre el operativo de vacunación que comenzará en las próximas semanas en escuelas de la provincia, Lozano explicó que esa fue una decisión que tomó la Dirección General de Escuelas y que en Quilmes serán once las instituciones que estarán disponibles.
Además, el funcionario especialista en virología molecular aseguró que “hay un plan de contingencia para poder realizar la vacunación y el reingreso a las aulas”. “Todos estamos muy interesados en que vuelva la presencialidad y la provincia se está preparando para eso. Va a depender mucho del estado sanitario en el que estemos” sostuvo y reconoció que hay “complicaciones evidentes” ya que en marzo va a estar comenzando la temporada fría y como ocurrió en otros países probablemente aumenten los casos.
“Tenemos cuellos de botellas a resolver con el retraso en la vacunación, la protección del personal docente y no docente, y la vacunación de los adultos mayores, tenemos que garantizar que para que las clases comiencen estén vacunados y protegidos, porque cada vez que abrimos un aula, cada una de esas burbujas que se abren en el aula se rompen las burbujas familiares de los chicos, las de los trabajos de sus padres (…) Estamos conviviendo con una serie de burbujas que estamos haciendo lo mas chicas posibles” afirmó y advirtió que “si nosotros no garantizamos que los adultos mayores estén vacunados en ese momento podemos generar un caos sanitario”.
Lozano estimó que hay alrededor de 7 millones y medio de adultos mayores, mas docentes y personal de salud son alrededor de 10 millones de personas que es necesario vacunar lo antes posible pero que será difícil que eso ocurra para principios de marzo. “Lo que hay que pensar es que si hay presencialidad desde marzo tienen que haber protocolos que garanticen que eso se minimice”.
“Lo que pase va a depender mucho de cómo nos comportemos, la relajación de fines de 2020, por agotamiento y la vacuna con fecha cierta, hizo un combo que provoco que la gente relajara las condiciones de cuidado y provoco un aumento de casos (…) Si aprendemos a convivir con el virus y mantener las medidas de cuidado cualquier apertura es posible pero siempre y cuando seamos muy consientes que este no es un tema partidario es un tema de salud pública, nos tenemos que cuidar todos (…) Si hacemos eso vamos a tener una situación controlable, sino vamos a tener una crisis sanitaria” cerró.