El economista y ex candidato presidencial por el frente Despertar, José Luis Espert, advirtió sobre el daño económico que está generando la cuarentena impuesta ante la pandemia del coronavirus en el país. Anticipó una caída de la actividad industrial récord, así como una inflación de tres dígitos para el año que viene. Consideró que para la elección de medio término «el Gobierno va a tener que ir casa por casa para explicar que Fernández no es el responsable de la crisis sino la pandemia».
En diálogo con El Termómetro radio, en el marco de la charla virtual que dará esta tarde (miércoles 15 a través de zoom) para vecinos de Avellaneda y Lanús, Espert explicó que, si bien «Macri nos llevó a una crisis», el programa económico de Alberto Fernández «también va a tener su crisis. Está pronosticado que para este año la caída de la actividad económica va a rondar el 15 por ciento y va a ser una de las más grande del mundo y una de las más grande de nuestra historia». Y aclaró que «eso significa miles de empresas que cierra y miles de trabajadores que quedan en la calle».
«Hay que agregarle otra crisis, que quizás tarde más en llegar, que es el tsunami de emisión monetaria que el Banco Central hizo para subsidiar el agujero fiscal que el Gobierno hizo va a explotar», auguró el economista y anticipó: «este año quizás terminamos con una inflación de dos dígitos, pero año que viene vamos a los tres dígitos»
Sobre el llamado a un diálogo nacional que propuso un sector de la oposición, Espert manifestó que está dispuesto a participar «si me llaman» pero que sería «muy claro con lo que hay que hacer» que, para él «está en contra de casi todo de los que están en ese dialogo. Muchos de los que están ahí en ese diálogo con miembros de la clase política, intelectual y empresarial absolutamente fracasada de argentina». Y sentenció: «Deberíamos tener muchos más miedo por nuestra decadencia que por el coronavirus».
Aún así consideró que «No hay dudas en lo que tendríamos que estar de acuerdo. Argentina es un país que no comercia con el mundo, que tiene esclavizado a la gente de trabajo, al comerciantes, los tiene agobiados de impuestos y las leyes laborales que tenemos son un verdadero desastre para la clase trabajadora porque hay 6 millones de trabajadores en negro».
Finalmente, cree que el Gobierno utilizará la pandemia como excusa de cara a las elecciones del próximo año: «cuando la gente tenga que votar el Gobierno tendrán que ir casa por casa para explicar por qué la crisis no es culpa de Alberto Fernández sino de la pandemia. Por supuesto que el relato oficialista va a ser esto. Además que la gente no lo va a entender le va a asistir una enorme cuota de razón de estar fastidiados con el Gobierno porque Fernández, junto con Kicillof y todos los Gobernadores e intendentes del país, es responsable de una cuarentena caníbal que funde a medio mundo y donde le explotan los contagios y los muertos».
Para el economista «la cuarentena tiene que ser el mínimo tiempo indispensable y durante ese tiempo testear a millones, para luego abrir y probar. Lo que estamos haciendo en el país es demencial» y se quejó porque Argentina no miró el espejo de otros países: «en todo el mundo se fue probando entre la cuarentena y aperturas. Está mal pensar en una apertura a tontas y locas, pero debería haberse hecho una cosa más organizada».