A casi cuarenta días desde que se iniciaron las medidas de aislamiento social, desde el Municipio de Florencio Varela analizaron el escenario actual y los efectos de la pandemia en el distrito. Si bien expresaron su preocupación por el panorama económico generalizado, destacaron el esfuerzo de la población y ratificaron la decisión provincial que no permite las salidas recreativas en los grandes aglomerados urbanos.
“Acá tenemos un promedio de cobrabilidad del 27 por ciento y esto ha hecho que baje la recaudación mucho más (…) Estamos luchando viendo cómo podemos ayudar a los comerciantes, es muy complicado, tenemos que salir entre todos y ver de qué manera el Estado local puede ayudar”, señaló en diálogo con El Termómetro el secretario de gobierno varelense, Christian Rodríguez, quien remarcó que “sin duda se depende del financiamiento Nacional y Provincial”.
En la comuna que gobierna Andrés Watson, hasta el momento se registraron 32 casos positivos de coronavirus y, en ese sentido, el funcionario sostuvo que la cuarentena está siendo efectiva en líneas generales. No obstante, reconoció también las dificultades que por estos días atraviesan los distintos sectores de la comunidad.
“Reforzamos el alimento adónde falta, lo que estamos tratando de hacer es ir a aquellos vecinos que no reciben nada, empezamos por los que no tienen AUH (Asignación universal por Hijo) o la Tarjeta alimentaria”, precisó y señaló que lo mismo está ocurriendo con el Servicio Alimentario Escolar, aunque consideró que “en estas situaciones (la ayuda) nunca es suficiente”.
En cuanto al sistema sanitario y frente al probable avance del virus en la región, Rodriguez informó que el área de Salud “se reforzó bastante” a partir de la coordinación entre los hospitales con los que cuenta el distrito, las unidades sanitarias y de las clínicas privadas.
“Hoy Varela tiene la totalidad de 100 de camas de terapia intensiva 200 de atención común y 450 en los centros de aislamiento”, detalló.
Por otra parte, pese a que está fuera de las competencias de la administración local, se refirió también al episodio ocurrido en la Unidad Penal Nº23 , donde la semana pasada un recluso murió baleado en medio de una protesta por mejoras en las condiciones de habitabilidad.
“El problema no es de ahora, es una unidad carcelaria para 3500 y tiene prácticamente el doble y esto hace que este tipo de situaciones se complejice aún más, por los recluso y guardia cárceles amerita un tratamiento especial”, evaluó.