Vecinos del barrio Don Orione reiteraron su malestar por los problemas que existen con las conexiones a la red de agua en diversos locales comerciales y el su desagüe en calles y veredas. Además de dificultar el tránsito, aseguran que en el ambiente se perciben olores nauseabundos.
Si bien existen varios puntos del complejo habitacional donde la situación se repite, por estos días uno de los problemáticos se centra en una especie de pasillo que se formó entre el edificio de la iglesia Sal Luis Orione y un local de comida que se instaló hace ya varios años sobre la Avenida Eva Perón
“La parrilla construyó un baño, que quedó deshabilitado y es realmente asqueroso. No sólo a la vista sino también al olfato”, relató a El Termómetro Ángela, una vecina que a diario circula por la zona cuando lleva a sus hijas a la escuela.
En este sentido, apuntan a la falta de controles por parte de las autoridades municipales, escenario que deriva en que “cada uno haga lo que quiera”. Otro ejemplo de ello es lo que ocurre en el cruce de las calles Iglesias Paz y Araujo, donde un frigorífico allí ubicado elimina los desechos líquidos a la vía pública sin ninguna consideración por los habitantes de esa cuadra ni de los pasajeros que toman el colectivo en esa misma vereda.
En tanto, el panorama es similar en varios sectores del barrio, donde “el agua brota” debido a cañerías rotas que no encuentran reparo por parte de la empresa Aguas Bonaerenses Sociedad Anónima (ABSA), la cual tiene a su cargo el servicio en esa parte de Almirante Brown.