(Por Macarena Ramirez)
El destrozo de un busto de Evita en Quilmes, dejó a la luz la foto del peronismo en la ciudad. Pese a que los dirigentes se esmeran en hablar de “unidad”, las cosas no parecen tomar ese rumbo en el distrito.
Días atrás apareció vandalizado el busto de Evita, ubicado en la calle Pellegrini y Canal de Beagle. Los primeros en reaccionar fueron los concejales de “Juntos por Quilmes” con Ángel García a la cabeza, quién inmediatamente repudió el hecho vandálico y convocó para el viernes 3 de Marzo a las 18.30 hs para realizar un acto de repudio y manifestó que era “una convocatoria abierta a militantes y vecinos, para reivindicar entre todos la vida y obra de la Abanderada de los Humildes”.
Desde el PJ rápidamente tomaron nota y ante algunos requerimientos de militantes se pusieron a trabajar en la reparación del monumento, aunque finalmente se consiguió uno nuevo donado por el ex concejal Roberto Gaudio; unos días después el sector que responde al ex intendente Gutiérrez sacó su propio comunicado. Allí dijeron que se realizaría un acto el jueves 2 de marzo en el lugar y se colocaría nuevamente el busto.
Efectivamente dos actos se llevaron adelante; el jueves fue encabezado por el “Barba” Gutiérrez, con presencia del PJ local, del ex rector de la Universidad de Quilmes, Mario Lozano y representantes del Frente Quilmeño para la Victoria (Hugo «Pájaro» Colaone, referente de Movimiento Peronista Auténtico; Pedro Gómez, referente de Nuevo Encuentro Quilmes y Diego Méndez, conductor de La Cámpora Quilmes). El viernes se hizo el otro, encabezado y organizado por Juntos por Quilmes (ahora nucleados en el sector de Mariotto, PPT) del que participaron otras agrupaciones como el Movimiento Evita, Kolina y la Martín Fierro.
Quilmes tiene más de una decena de sectores peronistas que están aún bajo el paraguas del Frente para la Victoria. Pese a los reiterados discursos de “unidad”, en Quilmes no logran juntarse ni para repudiar un hecho vandálico sobre el busto de la “Abanderada de los Humildes”; en ese contexto y a pocos meses de los cierres de listas parece casi imposible pensar en un acuerdo entre ellos.