El histórico dirigente peronista de Berazategui y ex diputado provincial Mario Giacobbe habló con El Termómetro sobre el fallecimiento y funeral del intendente Juan José Mussi: «Lo mejor que le puede pasar a un militante peronista cuando te vas es que te llore tu pueblo, no queda otra cosa que admirar».
El referente local comentó que los «unía pertenecer al núcleo de militantes de la década de los ’80». «La vida del peronismo nos llevó y nos trajo, él siempre tuvo un liderazgo muy férreo y su gestión hizo que tuviera que aceptarlo como conducción», comentó.
«Hablaba con Felipe Solá, que decía que ‘el de Mussi es un liderazgo único’, porque es un producto puro de la militancia. Es un médico de barrio, que perdió internas, que las ganó, y a meses antes de morir visitaba centros de jubilados», recalcó.
En ese sentido observó que «hoy es la tele política», ya que «algunos creen que es andar en bicicleta, pero no pasa nada si no te bajas», y agregó que » el formato de Mussi tiende a desaparecer». «Uno puede elegir ser un dirigente cercano o no, no se puede impostar y eso se transmite, es su sello», reflexionó.
Con respecto al futuro de Berazategui, Giacobbe entendió que «habrá tiempo para pensar qué se va a hacer», debido a que «Mussi deja una gran obra y hay que cuidarla, y a partir del lunes discutir cómo hacerlo». «La semana que viene comenzaremos a hablar quiénes son las personas adecuadas, hay que centrarse en construir consenso para que no decaiga esto», previó.
«La ciudad está por encima de la media de la tercera sur, es un mérito absoluto de Mussi, pero los indicadores económicos no escapan al contexto nacional. Confío en la gente que está. Y en lo que viene va a haber que incorporar la tecnología e inteligencia artificial», concluyó.



















