Lo que comenzó la semana pasada con la detención de la funcionaria bonaerense Alexia Abaigar y el allanamiento a la Municipalidad de Quilmes, detonó finalmente hoy con la detención de la presidente del bloque oficialista del Concejo Deliberante de Quilmes. Los sucesos podrían resumirse en la detención de Eva Mieri y el escándalo político, judicial y mediático que le siguieron.
Los hechos que iniciaron la jornada los resumió la propia intendenta Mayra Mendoza a través de sus redes sociales:
“Por pedido de Arroyo Salgado, durante esta madrugada allanaron, y siguen ahora, varios domicilios particulares, más el municipio de Quilmes. Tienen incomunicada a Eva Mieri desde hace más de tres horas. Todo completamente ilegal y antidemocrático, dentro de “la investigación” que tiene detenida a Alexia (Abaigar) en Ezeiza, desde hace una semana, por un pasacalle y un poco de bosta en la vereda del protegido diputado José Luis Espert”.
La cercanía histórica de Mieri con Mayra generó una inmediata repercusión mediática con rebote nacional. Es más, el escándalo en el Congreso de la Nación, donde diputadas kirchneristas increparon a José Luis Espert, tuvo sin dudas una motivación en las detenciones de la mañana.
Vale recordar que el origen de los hechos es la denuncia del diputado Espert en la Justicia después que militantes kirchneristas pusieran un pasacalle y arrojaran bosta en la vereda de su casa.
El Centro de Estudios Legales y Sociales, resumió esta situación expresando: “Allanamientos violentos, personas detenidas y esposadas por un escrache. Un hecho que, como mucho, podría ser una contravención, hoy es tratado como un delito federal grave. La justicia es instrumento del gobierno en esta desproporción”.
En ese marco, por la tarde, el rector de la Universidad Nacional de Lomas, Diego Molea, y el presidente del Colegio de Abogados de Quilmes, Bienvenido Rodríguez Basalo, junto a familiares de los detenidos (cinco hasta ahora), brindaron una conferencia de prensa para expresar sus observaciones sobre el accionar policial y judicial.
Allí se explicó que “la Justicia nos está acusando de tirar caca de perro y papeles en la vereda de la casa de Espert. Eso debería tramitarse en el Juzgado de Faltas por tratarse de una contravención”. Los allanamientos se llevaron adelante con orden de detención incluida, cuestión que los letrados también consideraron una irregularidad y una particular interpretación de la Ley de la Jueza.
También consideraron que “todo esto no puede suceder con personas detenidas en un país en democracia en un estado de derecho”, y agregaron que “en un país normal Espert debería estar acá sentado pidiendo la liberación de los detenidos”.
Por estas horas, los detenidos permanecían incomunicados, y esta situación todavía está lejos de culminar, más cuando voceros oficialistas aseguran que la Jueza podría ordenar más allanamientos y detenciones a pesar de los cuestionamientos. El escándalo político y mediático, parece estar garantizado.