El presidente de Autopistas Buenos Aires S.A. (AUBASA), José Arteaga, opinó sobre la resolución de la administración de Javier Milei que dispuso el cierre de la Dirección Nacional de Vialidad a lo que sostuvo que “es un desquicio pocas veces visto porque hace a la identidad nacional y a la soberanía por su grado de conectividad”.
“Todas las medidas que toma o no toma el Gobierno afectan. El gobernador Axel Kicillof y el ministro de Obras Públicas Gabriel Katopodis hacen malabarismos para asumir funciones que la Nación no hace”, marcó en comunicación con El Termómetro.
En esa línea, el titular de AUBASA vaticinó que “las provincias que tengan la posibilidad económica seguirán manteniendo y haciendo obra pública y las que no, quedarán aisladas del territorio porque ninguna concesión vial o privatización de mantenimiento va a tomar lo que no le es rentable» y subrayó que «el Estado tiene que estar presente más allá de la situación económica”.
Asimismo, resaltó que la medida trae “nuevas cosas que son incertidumbres” ya que “nadie sabe en qué fecha va a empezar a regir ésto, se elimina la Agencia de Seguridad Vial, una agencia para atacar, prevenir y asistir en materia de accidentología”. “A la CNRT no la eliminan pero le agregan funciones que deberían ser de Vialidad, tenemos que ver la letra fina”, advirtió.
Y agregó: “No hay respuesta para tanto interrogante porque es reciente, pero sí sabemos que van a empezar a incrementarse los niveles de accidentes. Se suma al deterioro de las rutas el hecho de que no va a haber control, esto desgraciadamente lo vamos a pagar con vidas”.
En tanto, indicó que “es muy posible en la zona donde le sea rentable al privado” haya nuevos peajes, aunque advirtió que deberán “asumir el costo del mantenimiento: grúas, iluminación, asistencia y señalización”. “No es solo cobrar el peaje”, avisó. En cuanto al diálogo con la gestión nacional, aseguró que “no hay con quién hablar y el que escucha tampoco te resuelve”, por lo que entendió que se “ha llegado a un límite la situación”.
Cuando se le consultó por las nuevas funciones de la Gendarmería en la cuestión vial, Arteaga recordó que actuaban como “auxiliares de organismos de control”, pero “hay lugares de la Argentina que no tienen presencia física permanente”.
“La fiscalización era de manera complementaria, a partir de ahora haría lo que hacía la Agencia de Seguridad Vial. Pero la Gendarmería no está preparada para eso, su función no es esa, no están capacitados, no dan abasto en tema de seguridad y ahora encima van a tener que controlar las unidades individuales. Es un gris, es algo que no se explica pero sí sabemos las consecuencias”, afirmó.
Para cerrar se refirió al proyecto de una nueva bajada de la Autopista Buenos Aires – La Plata en Ezpeleta, y ratificó que “está muy avanzado, en proceso de licitación” y que “la obra la va a financiar el municipio de Quilmes”. “La provincia está haciendo un esfuerzo más que importante para no paralizar ninguna obra pública”, cerró.