El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezó el acto en la Quinta de San Vicente por los 50 años del paso a la inmortalidad del expresidente y líder del justicialismo, Juan Domingo Perón. El mandatario aseguró que no fue una actividad para recordar el pasado «estamos acá para reconstruir el futuro» y aseguró que «hoy a los peronistas nos duele el presente que atraviesa la patria».
Kicillof compartió el escenario con su par de La Rioja, Ricardo Quintela; la senadora catamarqueña, Lucía Corpacci y la vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario. Estaba previsto que los acompañe el diputado nacional y presidente del PJ provincial, Máximo Kirchner, pero bajó su discurso a último momento y ocupó un lugar entre los invitados junto a la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, el de Lanús, Julián Álvarez, y el de Lomas de Zamora, Federico Otermín.
Una multitud se trasladó hasta San Vicente para escuchar al Gobernador quien aseguró que fueron al lugar donde descansan los restos de Perín para «reafirmar la vigencia de sus ideas y para sostener, frente al actual experimento anarco-capitalista que tanto daño le está haciendo a nuestro pueblo, que la alternativa se llama peronismo».
«Algunos pensarán que estamos para recordar el pasado, pero se equivocan: estamos acá para construir el futuro», planteó Kicillof y aseguró que en estos 50 años «intentaron mil veces dar por muerto el legado de Perón», pero «en el siglo XXI fueron Néstor y Cristina quienes le devolvieron al peronismo la fuerza transformadora que, gracias a Perón, les dio protagonismo a los trabajadores, a las masas populares que habían sido marginadas de la vida política y social».
El mandatario bonaerense aprovechó la ocasión para apuntar en contra de las medidas del Gobierno nacional y contrastar con Javier Milei. Así planteó que «Ahí viven Perón, Evita y Néstor: en la conciencia de justicia social, en la certeza de nuestro pueblo de ser portadores de derechos por solo habitar el pueblo argentino. Les va a resultar imposible convertirnos en colonia porque por acá pasó Perón y dejó el peronismo instalado en las conciencias, en las voluntades y en el corazón del pueblo».
«Hoy a los peronistas nos duele este presente que atraviesa la patria y que nos gobierne un presidente que hizo campaña diciendo que la justicia social es una aberración. Lo está llevando a la práctica con los resultados que vemos: más desigualdad, menos derechos, menos trabajo», y consideró que Milei significa privilegios para pocos y menos derechos para muchos. Es decir, exactamente lo contrario de lo que representa el peronismo».
«Cada vez queda más claro: el presidente Milei no vino solo a achicar el Estado, vino a desintegrarlo, así como quiere desintegrar la unidad nacional cuando pisotea el federalismo. El sueño de Milei de una Argentina sin estado es una pesadilla para la inmensa mayoría», agregó Kicillof y planteó que el presidente convoque al acto de mayo el 4 de julio «una fecha más apropiada», ya que coincide con el día de la independencia de los Estados Unidos.
Y lo comparó con Perón: «Cuando en el 73 Perón propuso el pacto social lo hizo luego de deliberar con los sectores, consensuar e incluir a todos. Y el primer objetivo era alcanzar una participación de los asalariados del 50% en el ingreso, mejorar la distribución del ingreso. En esa misma línea digo hoy que nuestro único pacto es con el pueblo, con la patria, y no lo vamos a traicionar por una foto. Nadie le va a hacer creer a los argentinos que no merecen una vida digna. En esta patria por la que pasó Perón, nadie se resigna ni naturaliza las desigualdades», lanzó.
Y en su rol de referente oposición, Kicillof planteó que el peronismo tiene dos tareas: «crear un escudo para proteger los derechos, reduciendo el daño social que ocasionan las políticas del Gobierno nacional, y al mismo tiempo debemos construir, junto a las fuerzas populares y democráticas de la Argentina, una alternativa que en el futuro permita revertir la destrucción que está en curso y poner al país al camino del desarrollo y la inclusión».
Y cerró con un llamado a la organización contra el gobierno: «- No nos vamos a desmoralizar, no vamos a bajar los brazos: vamos a organizarnos para luchar por el proyecto de país que nuestro pueblo se merece».