Este domingo se cumplen 20 años de la Masacre de Avellaneda en la que fueron asesinados por las fuerzas policiales, Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. Por este motivo, los familiares de las victimas realizarán un acto para conmemorarlos y pedir justicia.
“La reflexión principal es que a 20 años no podemos entender como no se ha avanzado más allá de los responsables materiales. Hubo una planificación del gobierno previa y un ocultamiento de pruebas, los medios después entendieron que no fue como decían en el gobierno nacional y provincial”, remarcó el hermano de Darío, Leonardo Santillán, en diálogo con El Termómetro.
En cuanto a lo sucedido aquel día, relató: “Fuimos a cortar para pedir un aumento de los planes, veníamos de la crisis del 2001 y el gobierno nacional había dicho que nosotros queríamos una lucha armada, o que buscábamos desestabilizar, habían presentado una denuncia, nos acusaban de 19 delitos, entre ellos el de sedición. Aníbal Fernández había dicho que hubo una asambleas, que se había llevado adelante, que resolvió el corte de los accesos”.
“El gobierno nacional buscaba mostrarse fuerte ante el FMI, en ese momento había protestas todos los días. Lo que buscaron hacer el 26 de junio fue decir que nos matamos entre nosotros, que queríamos desestabilizar y que estábamos planificando la lucha armada. Reprimieron, dijeron que nos habíamos matado entre nosotros y así poder combatirnos, pero no lo pudieron hacer porque aparecieron las imágenes de cómo fusilan a Darío socorriendo a Maximiliano. Felipe Solá dijo que era una guerra de pobres contra pobres, pero hubo una planificación para aleccionar la protesta social y la impunidad siguió”, agregó.
En ese sentido, destacó que el cambio de nombre de la estación Avellaneda por Darío y Maxi “es de un valor incalculable porque va a quedar para siempre”, pero subrayó que “queda la parte mas importante, los responsables políticos, Felipe Solá, Aníbal Fernández, Juan José Álvarez, Jorge Vanossi”.
“No queremos naturalizar que esta gente esté libre, caminando y ocupando cargos. La masacre de Avellaneda es un crimen del Estado. Queremos juzgarlos en un juicio, si se los condenara estos tipos no harían más estas cosas, dar estas órdenes, otros lo pensarían dos veces”, sentenció.
En cuanto al panorama actual, consideró: “Hay una situación similar, se está volviendo a estigmatizar al sector piquetero, nos señalan como el mal del país, y nosotros no somos los que firmamos con el FMI, o que generamos esta escalada inflacionaria. Nosotros somos quienes venimos bancando al pueblo, se busca estigmatizar, aislarnos, decir que somos un sector muy dinámico dentro de la sociedad. Siempre han intentado sacarnos de las calles, porque somos nosotros quienes señalamos y ponemos en agenda mucha protesta social”.
Para cerrar, detalló que este domingo 26 van a estar en el Puente Pueyrredón “señalando todas estas cosas”. “Esta situación económica no la puede estar pagando el pueblo, las represiones que se viven día a día. El 25 de junio vamos a hacer una jornada cultural en la estación, con un acto y marcha de antorchas para acampar y hacer la vigilia de cara al 26 de junio”, cerró.