La sesión de Diputados donde se aprobó la refinanciación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional dejó lesionada a la colación de Gobierno. Entre los 28 votos en contra y las 11 abstenciones, un grupo que se encolumna detrás de la figura de Máximo Kirchner marcó posición y adelanta complicaciones para los próximos dos años del oficialismo. Al mismo tiempo, La Cámpora emitió un duro comunicado que acusó al Gobierno de aplicar un ajuste. Ahora, el ministro de Desarrollo Social de la Provincia y hombre fuerte de la organización, Andrés Larroque salió a cruzar públicamente al Presidente por su «silencio» ante el «ataque a Cristina», en la apedreada al Congreso.
Aturden el silencio y la parsimonia del gobierno frente al ataque al despacho de la Vicepresidenta.
— Andrés Larroque (@larroqueandres) March 12, 2022
El fuego no perece apagarse en el peronismo. El acuerdo con el FMI ha marcado un punto de inflexión en la alianza que se gestó (y cada vez aparece cómo única razón) para ganarle a Mauricio Macri en 2019. Tras meses de discusión en la arena política, desde el acto de Máximo Kirchner en Lanús, en medio de la campaña electoral a las legislativas que el oficialismo perdió escandalosamente, para luego renunciar a la presidencia del bloque oficialista en la cámara baja. Todos hitos de una grieta interna en el Frente de Todos que cada día se agranda un poco más.
La votación en Diputados de la refinanciación de la deuda contraída por Mauricio Macri fue el punto de inflexión, unos 40 legisladores oficialistas no acompañaron el proyecto y ponen en jaque la débil mayoría que se conseguía para aprobar los proyectos que envía el ejecutivo. Los ataques al Congreso, en medio de una enorme protesta en la plaza también abrieron un poco más esa grieta. La zona apedreada fue el despacho de la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien con un video apoyó la protesta, se puso en contra del acuerdo y repudió los hechos de vandalismo, que entendió contra su persona.
Otra vez… inmensa pena. pic.twitter.com/bFP7Znz0sy
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) March 11, 2022
En medio de enojos y amenazas de ruptura por la falta de acompañamiento y rebelión de La Cámpora, el Gobierno Nacional no hizo mención a los hechos de violencia. Alberto Fernández aprovechó su viaje a Chile, por la asunción presidencial de Gabriel Boric para evitar el tema y pasar de página, pero desde la organización no se lo dejaron pasar.
Con una publicación en sus redes sociales, el ministro de Desarrollo Social de la Provincia de Buenos Aires, Andrés Larroque, se quejó por la ausencia de repudio del Ejecutivo nacional a los ataques al Congreso y contra Cristina: «Aturden el silencio y la parsimonia del gobierno frente al ataque al despacho de la Vicepresidenta», puso en su twitter. De esta forma, dejan a Eduardo «Wado» de Pedro como el único actor de nexo entre la organización del hijo de la Vicepresidenta y el Albertismo.
Mientras escala la pelea que varios intentan no lleve a una ruptura apresurada del Gobierno; lo de Larroque se transforma también en el segundo ministro bonaerense, junto a Sergio Berni, en cuestionar la autoridad presidencial y deja al Gobernador en un punto incómodo, mientras sus funcionarios atacan al Gobierno él se había intentado mostrar cerca de Alberto y reforzar el trabajo conjunto.
Se abre un escenario incierto para la alianza de Gobierno en el que parece muy difícil poder evitar una PASO que dirima las diferencias. Al tiempo que se discute en la Provincia de Buenos Aires la posibilidad (cierta esta vez) de adelantar las elecciones y separarlas de las nacionales, en un análisis del kirchnerismo duro que los comicios presidenciales están perdidos.