En un clima de entusiasmo y con las instalaciones del club “El Porvenir” colmadas por militantes, funcionarios y seguidores de Juntos por el Cambio, el intendente Martiniano Molina presentó su lista de candidatos.
No faltaron ni los bombos, ni las banderas, ni los cantitos, demostrando que el oficialismo fue adaptando sus formas al folclore electoral del conurbano. En ese marco, los candidatos a fueron presentándose uno a uno, con aplausos destacados para la candidatos a concejales Ely Virgilio y Juan Bernasconi, y una ovación para Guillermo Galetto, secretario de Servicios Públicos y primer candidato a concejal.
La lista de oradores se resumió a la senadora provincial Lorena Petrovich, quien encabeza la lista de senadores por la Tercera Sección; Cristian Ritondo, ministro de Seguridad y primer candidato a diputado nacional por la Provincia; y el Intendente Molina.
Petrovich afirmó que “Martiniano va a volver a ser nuestro intendente a partir del 10 de diciembre”, y dedicó un párrafo especial a la candidata opositora Mayra Mendoza, diciendo que “en Quilmes hay una diputada que se puso zapatillas para recorrer un villa pero se las puso ayer”.
A su turno, Ritondo afirmó que para el oficialismo es “muy importante tener a Martiniano en el equipo” y que Quilmes sólo tiene destino con Martiniano intendente y María Eugenia Vidal gobernadora”.
El cierre estuvo a cargo de Martiniano Molina, que sigue transmitiendo un enorme entusiasmo para dar batalla por su reelección que evidentemente está contagiando a los suyos.
En un discurso que se viene afirmando con el tiempo, el Intendente aseguró que “encontramos una ciudad abandonada y la estamos transformando”. Elogió y agradeció la gestión de la gobernadora Vidal que “le dio dignidad a los quilmeños”. También destacó a lo largo de varios minutos las obras que viene realizando su gestión en áreas como salud, educación y seguridad, haciendo un gran hincapié en la obra pública.
Los momentos más calientes de su alocución estuvieron dedicados a los opositores, a los que les pidió “que se llamen a silencio” porque “tuvieron el tiempo y los recursos para hacer las cosas y no hicieron nada, eran todas mentiras”, por eso “esta transformación llegó para quedarse”.
Para cerrar, Molina admitió que “la elección no está ganada” pero nos enfrentamos a los que dejaron a la Argentina y a Quilmes en “el abandono, la desidia y la mentira”, y recordó a voz en cuello, que “juntos somos imparables”.