En una intensa sesión, el Concejo Deliberante de Lanús aprobó la rendición de cuentas 2017 de la gestión de Néstor Grindetti. El oficialismo consiguió la mayoría a través del voto doble del Presidente en una jornada cargada de críticas opositoras ante la falta de información proporcionada por el ejecutivo municipal.
Diez días después del primer intento fallido de sesión Especial, Cambiemos consiguió el quórum necesario para poder tratar las cuentas en el recinto. En su alocución, el presidente del bloque Unidad Ciudadana – PJ, Héctor Montero, señaló que “luego de haber dado un mensaje al Ejecutivo”, al vaciar la primera convocatoria, decidieron discutir el expediente y denunciar la falta de información porque “pasado el plazo legal se aprobarían de hecho” como estable el Tribunal de Cuentas.
Montero fue el primero en argumentar desde la oposición. Realizó un extenso análisis de la escueta información que proporcionó la Municipalidad sobre los gastos del año pasado. Según el edil, creció la deuda pública municipal, parte de lo que considera “una matriz de endeudamiento que comenzó en 2016”. Asimismo, señaló que el pasivo corriente es el más alto de la historia con 364 millones de pesos y que los servicios de deuda tuvieron una sobre ejecución de casi 200 millones de pesos.
Por su parte, la concejal Natalia Gradaschi (Unidad Ciudadana – FPV), hizo un puntillozo detalle del pedido que hicieron al Ejecutivo municipal, a principios de abril, para que proporcione la información correspondiente a los expedientes de gastos. “Es la primera vez en la historia de este Concejo Deliberante que los concejales, oficialistas u opositores, no contamos con los datos necesarios para analizar las cuentas”.
“No deben ser tan claros los números si no los quieren mostrar, es evidente que el intendente Néstor Grindetti algo quiere ocultar, sino nos hubiese proporcionado la información que pedimos”, agregó enojada. Su compañero de bloque, Edgardo Depetri recordó sus días en el Congreso y a los gritos en el micrófono acusó a Cambiemos de tener “una intencionalidad de no discutir los temas de Lanús. Hay un blindaje sobre el Intendente”.
Luego de más de una hora de críticas opositoras, la encargada de defender los gastos del Ejecutivo Municipal fue la concejal Noelia Quindimil, hasta diciembre pasado Secretaria de Gobierno de la gestión. La Edil realizó un largo análisis de los resultados de los balances y para finalizar, casi a pedido de la oposición, brindó un detalle de las obras en las que se gastó el presupuesto (datos que no estaban en el expediente que llegó al Concejo). Además, valoró que la Comuna “ejecutó más del 90 por ciento” de los fondos comprometidos.
Luego de la intervención de la exfuncionaria la discusión se desvió del contenido de las cuentas y pasó al plano político con una serie de acusaciones cruzadas. El más picante fue el presidente del bloque de Unidad Ciudadana, Mariano García, quien le pidió a los concejales de Cambiemos que “caminen Lanús” porque “los chicos se están cagando de hambre”. Además recordó “Grindetti está imputado por tener cuentas offshore y sale en la tele a explicar por qué vive en Capital y no en el distrito”.
A la hora de la votación no hubo sorpresas. Los cuatro bloques opositores votaron en forma negativa, dejando la votación empatada en 12 y fue el presidente del cuerpo, Marcelo Rivas Miera, quien definió la aprobación de los gastos con su voto doble.