El intendente Martiniano Molina recibió hace pocos días a las concejales del Frente Comunal para hablar sobre la agenda del Concejo Deliberante en 2017. Durante el encuentro, se acordó la llegada de Patricia Capparelli y Agustina Fredes al oficialismo. Sin embargo, por el momento acompañaran el espacio, aunque no integrarán el bloque en el HCD por el momento.
Desde el comienzo de la gestión de Molina en el Municipio, el sector vecinalista se mostró alineado al gobierno en el espacio del legislativo municipal. “No queremos poner piedras en el camino”, se decía. Con el correr del tiempo, la relación se fue afianzando y consolidando hasta llegar al punto de formar esta nueva alianza.
“Acordamos que pasamos a formar parte de la estructura de Cambiemos, pero no del bloque. Obviamente respetando nuestra identidad peronista”, dijo la concejal Capparreli, quien sostuvo que se encuentran evaluando y consultando la posibilidad de integrarse al espacio en el Deliberante.
La edil manifestó su ganas de renovar la banca, ya que termina su mandato en diciembre próximo. Igual tampoco descartó la posibilidad de ser funcionario en caso de que exista la propuesta: “Podría imaginarme como funcionaria”, deslizó. Al mismo tiempo destacó la “apertura general” de Cambiemos y eligió a Molina por ser un jefe comunal que “se preocupa”, pero “también se ocupa”.
Capparelli, quien llegó al HCD de la mano del massismo, recordó que dejaron el espacio porque “se decía que era el cambio y era más de lo mismo” y ya que “el proyecto que tenían para Quilmes era hacer una pista de skate”. Tras la partida decidió crear un espacio independiente (Trabajando por Quilmes) para luego acompañar a Daniel Scioli. “Pensé que iba a separarse del kirchnerismo y vimos que no”, expuso como uno de los motivos para la unión con Fredes y Nunzio Miguel (ahora en el Partido Fe) en el vecinalismo.