Tras la represión por parte de las fuerzas de seguridad durante la marcha que se dirigía al Monumento a la Bandera como uno de los actos de cierre del Encuentro Nacional de Mujeres, la dirigente del PO Jenny Sánchez Carrión contó cómo se produjeron los incidentes frente a la Catedral. “La actitud fue de confrontación”, dijo.
La marcha se desarrollaba sin incidentes, hasta que un grupo de personas que se desprendió de la columna principal se dirigió hacia la Catedral, donde se encontraba un grupo de policías custodiando. Según las versiones, se produjo un forcejeo que derivó en la respuesta violenta por parte de los agentes.
“Veníamos marchando y la actitud de la Policía era de confrontación. Había un despliegue enorme al lado de la columna principal con una provocación constante. Ellos gritaban cosas y hacían gestos”, sostuvo la dirigente del Partido Obrero.
Sin embargo, los agravios hacia las mujeres se sintieron desde la llegada de los diferentes grupos a la ciudad santafesina. “Nos recibieron con afiches que se veía a mujeres con el torso desnudo y decía: ‘así, no’. Y además el arzobispo tuvo declaraciones fuertes también”, afirmó Sánchez Carrión.
El encuentro, que cuenta con la presencia de 70.000 militantes por los derechos de la mujer, tuvo un inicio complicado, ya que la comisión del PO sufrió inconvenientes para viajar. “Llegamos a las 5 para tomar el colectivo, pero fueron estirando la llegada de los micros. Fue un boicot deliberado. Hicimos una serie de cortes y recién ahí llegaron”, declaró la referente.
Además, Jenny contó que en el cierre que se realizará hoy buscarán que el próximo Encuentro Nacional se lleve adelante en Capital Federal para que “podamos expresarnos en el centro político del país”.