Bajo la consigna “la militancia de Quilmes se organiza en defensa de nuestra compañera Eva Mieri y en defensa de todos los presos políticos del régimen de Milei”, la intendente de Quilmes Mayra Mendoza encabezó un plenario donde dio fuertes definiciones, habló de la situación política, la interna, la listas y de lo que viene.
Pese a que en las últimas semanas Mayra debió asumir un fuerte protagonismo mediático y ha dado definiciones de todo tipo, en el plenario realizado anoche en el Ateneo Néstor Kirhner en Quilmes Oeste, también se refirió a cuestiones locales.
En este sentido y ante el inminente cierre de listas dijo “el que se quiere enojar que se vaya enojando”. Advirtiendo que usará la lapicera con menos contemplaciones que en ocasiones anteriores.
Asimismo sorprendió pidiendo que “abracen a Burtoli”, en referencia al concejal Ariel Burtoli, quien rompiera oportunamente el bloque de concejales oficialista y se sumara a las filas “axelistas” del intendente Jorge Ferraresi.
Más allá que algunos lo interpretaron como una ironía, dada la situación procesal de la concejal Eva Mieri y de una potencial candidatura de Mayra a la Legislatura o al Congreso, Burtoli es quien sigue en la línea sucesoria de la Intendencia Municipal. Por su puesto todo esto dentro del marco de una unidad que la propia jefa comunal viene reclamando.
En este marco, trascendió que en los últimos días hubo diálogos entre Ferraresi y Mendoza, sin embargo, Burtoli sigue sin establecer comunicación con el oficialismo de Quilmes y todavía no da señales de retornar al bloque.
Mayra también admitió que “como todos” había sufrido la decisión de la Corte que tiene presa a la ex presidenta Cristina Fernández y que su actitud política había cambiado a partir de ello. Además, lamentó que el gobernador Axel Kicillof “no pusiera el cuerpo” ante semejante situación como muchos militantes esperaban.