Tras el anuncio de la firma del convenio entre el gobierno nacional y el gobierno de la provincia de Buenos Aires para implementar la extensión en una hora diaria de la jornada educativa, su implementación se vislumbra complicada en el conurbano bonaerense. La titular de Suteba de Quilmes, Fabiana Pérez Valdez, detalló que en el distrito la disposición se podrá implementar sólo en cinco de las 87 escuelas primarias existentes, a lo sumo seis, y sólo en una se establecerá la jornada completa, se trata de la 49 de Ezpeleta.
“En este momento están en evaluación varias escuelas pero habría entre 5 y 6 escuelas primarias que podrían implementar la 5ta hora o la jornada de 25 horas semanales. Muchas de las situaciones tienen que ver con la infraestructura, otras con la organización escolar y otra que no fue debatida o consensuada con la comunidad educativa”, explicó Pérez Valdéz.
La dirigente de Suteba explicó: “Algunas escuelas no tienen los espacios para agregar la hora o extender un día a ocho horas, hay escuelas en las que se piensa en un ingreso más temprano, otras a lo último, depende de muchas cosas, coordinar entradas y salidas, y también como se organizan las familias. Hay otras escuelas que están en obras, o no tienen los cargos nombrados. Hay docentes para los que va a ser imposible, otros que aceptan extender su jornada laboral, otros que no. Estas horas que se extienden se le extienden a los maestros de grado, es compleja la organización institucional”. Y agregó que el espíritu tanto de la ley nacional de educación como de la provincial es que todas las escuelas tengan jornada completa, sin embargo, en el conurbano esa disposición es de muy difícil ejecución.
En ese marco, sostuvo que para la segunda etapa a implementarse desde marzo 2023, hay que pensar un “proyecto de reorganización” para aumentar el número de escuelas con quinta hora. “Implica mucha voluntad, pensar muy bien la situación, y también tener en cuenta si las familias acuerdan o no, es un proyecto para acordar con la comunidad educativa. A veces también está la voluntad pero no las condiciones objetivas”, afirmó.
Además, la dirigente gremial afirmó: “Hay una crisis profunda en el sistema educativa en cuanto a los contenidos, en la pandemia hicimos un esfuerzo inmenso pero no alcanzó para que se pudieran incorporar los contenidos, tenemos una dificultad muy grande, el primer ciclo (de primero a tercer grado) es el que alfalbetiza, y después se profundizan los contenidos. Hoy nos encontramos con estudiantes de secundario que no terminaron su proceso de alfabetización o no tienen la comprensión lectora o los cálculos matemáticos. Hubo primero un refuerzo de los contenidos, pero hay que fortalecerlos todavía”.
Agregó que también hay que dar un debate sobre reformas curriculares, discusiones que se planteaban ya previo a la pandemia y que por esa situación se pusieron en pausa. “Es necesario que los contenidos se actualicen, hay una crisis donde todos tenemos que poner la mirada, el debate y la reflexión”, afirmó.
“El martes tuvimos reunión de delegados y salió con fuerza que necesitamos espacios de formación y reflexión, nos faltaron los debates y reflexiones hacia el sistema. Ni las familias, ni los trabajadores, ni los estudiantes somos los mismos. La violencia que vemos también se traduce hacia adentro de las escuelas y necesitamos nuevas herramientas de abordaje. No es solo discutir contenidos, sino como enfrentar hoy las situaciones de las aulas y como llegan nuestros estudiantes”, marcó.
Finalmente, Pérez Valdez, precisó en cuanto a la revinculación post pandemia en las escuelas primarias se recuperó casi en su totalidad, pero eso no ocurre de la misma manera en el nivel secundario, donde los estudiantes vuelven pero eso no se sostienen en el tiempo y tiene intermitencias, un tema que, dijo, hay que abordar con políticas públicas y agregó que se ve un alto nivel de ausentismo en el nivel inicial, jardines de infantes.