Los trabajadores de las empresas Emebe XXI y MP Sistemas SRL realizan un acampe en la sede operativa de las compañías que se encuentra en Llorente 195, Sarandí, luego de que los dueños decretaron el cierre. El reclamo es para que les paguen las indemnizaciones correspondientes.
“El 6 de julio se acercó la empresa y nos convocó a todos los compañeros para decirnos que nos tenían que despedir a todos porque los números no daban y que no tenían cómo pagar los sueldos y las indemnizaciones. Nos ofrecieron el 20 por ciento de la indemnización real y encima en cuotas”, relató a El Termómetro el delegado de Emebe XXI, Sergio Acosta.
Además, señaló que “la empresa en ningún momento presentó una preventiva de crisis, ni mostró ningún papel que demuestre ante la ley que está pasando esta situación”, ya que “pretenden ampararse en el artículo 247 para pagar la mitad de los sueldos y las indemnizaciones”.
Los trabajadores despedidos son 48 y 14 de ellos se encuentran en la puerta de la empresa realizando un acampe en modo de protesta tras no aceptar la propuesta de los dueños. Emebe se encargaba de la venta mayorista de artículos de librería y escolares y MP Sistemas vendía a oficinas y empresas de manera inmediata.
Junto a estas dos compañías, se encontraba una tercera, DS Técno, que se dedica a la venta de estos artículos pero a través de internet y que aún continúa funcionando. “Los dueños son Pablo Mikiej, su hija Julieta y Diego Salum”, detalló el delegado.
En esa línea, comentó que tuvieron tres audiencias en el Ministerio del Trabajo y que luego de ellos desde la empresa se volvieron a contactar “pero la propuesta es la misma, un pago menor al correspondiente y en cuotas”.
“Encima a nosotros no nos pagaron el sueldo de junio ni los aguinaldos, si hoy tengo que salir a comprar para darle de comer a mi familia no tengo plata”, lamentó y agradeció al Sindicato de Empleados de Comercio Lanús – Avellaneda (Secla) y a los vecinos del lugar que les acercan comida y bebidas calientes mientras realizan la protesta.
“Nosotros pedimos la reincorporación, pero cómo el argumento es que cierran, pedimos la indemnización que corresponde. A un compañero que está hace 36 años le corresponden 36 sueldos, le ofrecieron 12 en 12 cuotas, con el agravante de que en un año esa plata pierde valor. Nos vamos a quedar hasta que la empresa nos traiga una oferta razonable”, cerró Acosta.