La sesión de este martes en el Concejo Deliberante de Quilmes dio el marco en el que se expuso la situación que atraviesa el flamante presidente de bloque de Unidad Ciudadana denunciado por violencia de género. El tema lo incorporó la concejal del GEN, Gabriela Fernández, a través de un pedido para que el Municipio implemente un protocolo de actuación para estas situaciones; mencionó también las denuncias contra el funcionario de la Agencia de Fiscalización, Marcelo Atis.
A partir de la difusión en diversos medios de una denuncia por violencia de género contra el ex presidente del Concejo Deliberante durante la gestión de Francisco “Barba” Gutiérrez y actual presidente del bloque de Unidad Ciudadana, se hizo pública la situación de José Migliaccio y fue la concejal Gabriela Fernández quién llevó el tema al recinto.
El discurso de la concejal comenzó haciendo referencia a Marcelo Atis, quién hasta hoy se desempeñó como número dos del ahora ex titular de la Agencia de Fiscalización y Control Comunal del municipio. Fernández se pronunció en duros términos contra el funcionario a quién calificó de “sujeto nefasto” y relató diversas denuncias por “persecución” en su antiguo trabajo en el Hospital Francés, pero también al frente del la AFyCC desde donde llovieron quejas por acoso laboral e incluso por acoso sexual.
Siguiendo la misma línea aseguró que “hoy no puedo hacer como si nada pasara en este Honorable Cuerpo en vista a las publicaciones de las últimas horas sobre el concejal Migliaccio y la causa por violencia de género donde la víctima es una empleada municipal” y pidió trabajar en un protocolo institucional para prevenir, y erradicar el acoso laboral, de género, acosos sexual y/o discriminación de cualquier índole. Además, planteó la problemática actual, ya que hay una orden de restricción de 300 metros, pero ambos trabajan en el mismo edificio.
Ante una incomodidad evidente por parte de muchos de los presentes, Migliaccio pidió la palabra; “entiendo, comparto, acompaño y lucharé por las ideas que tiene la concejal Fernández” aseguró el concejal y se defendió “hay una denuncia hecha al revés, soy un hombre que sufrió violencia, no una persona que ejerció violencia, hay pruebas y hay testigos”, dijo que ha estado siempre a disposición de la justicia, que se somete a derecho y que la justicia va a decir que es “un hombre inocente”. Pero también apuntó a quienes distribuyeron la información y a los medios que la publicaron, ya que consideró que está estrechamente relacionado a su llegada a la presidencia del bloque de Unidad Ciudadana en el distrito. Finalmente, cerró diciendo que este es el peor día de su vida.
A este descargo siguieron las palabras de otros concejales (ninguno de la bancada que preside Migliaccio). Una de las más duras fue Susana Cano del bloque de Unidad Ciudadana – Juntos por Quilmes, quién al borde de las lágrimas aseguró “no me importan las excusas, no me importan las explicaciones, la manipulación es una de las características de los maltratadores y de los violentos (…) Si te pusieron restricción, te pusieron cautelar, es porque hubo pruebas”; acto seguido Migliaccio volvió a pedir la palabra para señalar a ese sector como el impulsor de que el tema se haga público.
David Gutiérrez, compañero de Migliaccio durante la gestión de Gutiérrez, salió en su defensa “no tiene una personalidad que vaya con la violencia” aseguró; remarcó que el Concejo no es un lugar para “administrar justicia” y que también hay que discutir sobre qué pasa con los hombres que sufren violencia.
Desde el bloque de Cambiemos, quién tomó la palabra fue el concejal Maisu, quién se manifestó a favor de trabajar en un protocolo, destacó el trabajo que durante el año se hizo en torno a la problemática de violencia de genero y consideró que el Cuerpo “no podía hacerse el distraído” pero que tampoco “es el que tiene que juzgar a Migliaccio”. Por último el concejal Fragueiro, quién dijo que no quiere que pase por alto la situación del funcionario Municipal (Atis) y que más allá del protocolo, desde el Concejo Deliberante hay que avanzar armando un expediente y citando a la gente para que dé testimonio de lo sucedido y avanzar.
Finalmente la minuta de comunicación verbal presentada por la concejal Fernández, fue aprobada por la totalidad del Cuerpo.