Después de cuatro años, El Tribunal Oral Criminal (TOC) Nº 3 de Quilmes condenó a 12 años y 6 meses de prisión a Fernando Amaro, uno de los señalados como responsables del crimen de Adrián Novillo. La familia de la víctima, que murió como consecuencia del ataque a golpes de una patota, consideró que “se podría decir que se hizo justicia”, aunque la sentencia “fue menor” a lo que esperaban.
“Teniendo en cuenta que lo atacaron entre ocho y diez personas, que solamente esté uno detenido, cuando fue un homicidio en situación de robo y con ensañamiento, me parece que no es nada. Los que le hicieron esto a Adri caminan libres por la calle y después de años logramos que uno solo vaya 12 años preso”, expresó en diálogo con El Termómetro la mamá del joven brutalmente atacado en junio de 2014 a la salida del boliche Space.
Si bien la decisión judicial es un primer paso, la mujer aseguró que seguirán adelante hasta que “todos sean juzgados” ya que Amaro “no fue el único” que participó en el ataque que le provocó la muerte a su hijo tras casi dos semanas de agonía. De la misma manera, cuestionó la falta de celeridad e interés para investigar el caso.
“Las instituciones encargadas de investigar no lo hicieron (…) esa es la venta con la que cuentan los delincuentes. La Justicia no acciona y uno se queda sumergido en un dolor inmenso y no sabe qué hacer”, agregó.
En este contexto, recordó que desde que mataron a Adrián ella y sus otros hijos debieron mudarse por las constantes amenazas que recibían de parte de los agresores y frente a la falta de medidas de seguridad.
“Es demasiada la desidia del Estado y todo lo que tenemos que pasar los familiares de víctima”, evaluó.