Internos de la Unidad 54 de Florencio Varela y de la Alcaidía de Batán protagonizaron una serie de reclamos para peticionar mayores medidas de prevención.
Durante la jornada del lunes se conoció que los detenidos de muchas cárceles de la provincia de Buenos Aires no cuentan con la medidas sanitarias y cuidados necesarios para evitar el contagio del COVID-19. Los mismos internos, a través de sus familiares, denunciaron que no sólo no les están entregando productos de higiene y limpieza sino que no les están proveyendo alimentos de calidad y a muchos no los dejan tener contacto con sus abogados.
También denuncian que en algunas dependencias los empleados del SP no están usando barbijos ni guantes y circulan con normalidad por las instalaciones. Además, habría casos positivos en Unidades Penitenciarias de La Plata y uno posible en la Unidad n° 5 de Mercedes.
El Servicio Penitenciario bonaerense, por su parte, detalló que en Florencio Varela, los internos provocaron disturbios y prohibieron el acceso al lugar por lo que autoridades penitenciarias se hicieron presentes controlando la situación.
En Batán los incidentes se desataron en el Pabellón B en donde los reclusos , según indica el comunicado, rompieron parte de las instalaciones y arrojaron elementos contundentes contra el personal.
Ante este panorama, desde la Comisión Provincial por la Memoria indicaron que se encuentran relevando los casos de cada Unidad Penitenciaria y que si bien el Servicio Penitenciario asegura que están “distribuyendo los elementos necesarios, “evidentemente no alcanza”.
