El Consejo de la Magistratura bonaerense aprobó ayer un cambio sustancial en su reglamento y establece, por primera vez, el orden de mérito para la elección de jueces, fiscales, defensores oficiales y asesores tutelares en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires. Desde el oficialismo provincial lo destacaron como una pata más de la reforma judicial que impulsa el gobierno de María Eugenia Vidal. El año pasado la Legislatura aprobó una ley que la obligación de contar con un orden de mérito para elegir a los magistrados.
El orden de mérito significa que, para formar las ternas de candidatos que son elevadas a la Gobernadora para que ella elija de entre uno de ellos quién será el futuro magistrado, el Consejo debe elegir entre los que hayan quedado mejor posicionados.
Aseguran que gracias a este cambio podría reducirse sustancialmente el margen de discrecionalidad política para elegir a los futuros jueces, ya que antes la selección quedaba sujeta a que los candidatos sólo hubieran aprobado un examen escrito.
Esto se da en medio de la discusión por el pliego a Juez de la Corte Suprema de la Justicia de Buenos Aires de Sergio Torres, Juez de Comodoro Py, elegido por Vidal para ocupar la silla bacante en la máxima autoridad judicial de la Provincia. Ya consiguió dictamen de la comisión y podría ser aprobado por el Senado bonaerense en la sesión del próximo jueves 11.
A partir de ahora, para establecer quienes son los mejores candidatos, el Consejo de la Magistratura está obligado a formar esas ternas y tomará en cuenta, además de la nota del examen escrito, un examen oral que será videofilmado, los antecedentes profesionales de los candidatos, el desempeño que hayan tenido en los cursos de la Escuela Judicial -que según la ley sancionada el año pasado será obligatoria a partir de 2021-, y el puntaje que se les asigne en una entrevista personal que también será videofilmada.