En la previa al inicio formal de clases tras el receso, desde el Consejo Escolar de Quilmes llevaron adelante tareas de refacción en los establecimientos del distrito. Con un presupuesto “acotado”, según aseguraron, lograron atender la demanda y reacondicionar los edificios que así lo requerían.
“Hemos hecho un montón de obras (…) No está en riesgo el inicio (de las clases) por la situación de las escuelas, faltan cosas pero se están poniendo en valor y queremos que estén lo mejor posible», relató a El Termómetro el presidente de la entidad, Danilo D’angelo.
En particular, mencionó que las principales tareas se centraron en la reparación de estufas, calderas y cañerías, tanto en primarias, secundarias y jardines de infantes.
Más allá de la labor durante estas dos semanas, el consejero remarcó que la tarea cotidiana de la dependencia consiste en “asistir emergencias”, para lo cual cuentan con un presupuesto que promedia los 500 mil pesos y que suele ser insuficiente ya que “si se lo divide por la cantidad de escuelas, son mil pesos por cada uno de los edificios».
«Todos los días hay una o dos bombas de agua que se rompen o se las roban. Cuando asumimos costaban tres mil pesos, hoy cuesta unos 5800″, ejemplificó y puntualizó en que, además, se generan muchos retrasos para resolver los pedidos porque “hay mucha burocracia y hay que hacer los pasos correspondientes para que la Provincia apruebe las reparaciones».
Pese a estas dificultades, D’ángelo se mostró optimista y estimó que “las escuelas van a estar bien”.