La UFI N° 3 de Quilmes ordenó el desalojo de unas 15 familias en la zona de Bernal oeste. El operativo se llevó adelante en la mañana del jueves y contó con la participación de gran cantidad de efectivos de la Policía Bonaerense, de la Policía Local y personal del Municipio estuvieron actuando en las inmediaciones de avenida Lamadrid y Camino General Belgrano. Por el momento no se habrían registrado inconvenientes.
A mediados de enero, un grupo de más de 100 familias comenzaron una toma en la zona lindera al frigorífico Penta que terminó con una brutal represión por parte de la policía. Sin embargo, las personas quedaron a la vera de avenida Lamadrid, entre 394 y 396 y a la intemperie en improvisadas casillas de lona y cartón.
Como consecuencia, se confirmó una “mesa de gestión” conformada por tres secretarios de alto rango del Municipio de Quilmes, representantes de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, de las Casa de la Justicia, del área de Hábitat del Ministerio de Desarrollo Social, delegados de la Pastoral Social del Obispado de Quilmes, del Consejo de Asentamientos y delegados de los Acampados.
Por medio de una serie de reuniones se avanzó en la posibilidad de reubicar a cada familia de acuerdo a criterios de prioridades y urgencia. Pese a un acercamiento de las parte, la Justicia ordenó el desalojo. El obispo auxiliar Maxi Margni y otros sacerdotes se hicieron presentes para mediar en la situación, aunque los efectivos no dejaron tener contacto con las familias y no tuvieron comunicación ni con el fiscal de la causa ni con autoridades municipales.
Desde la Pastoral Social de la Diócesis presentaron un recurso de amparo en la Defensoría del Pueblo. Y además indicaron que el viernes se iba a realizar una nueva reunión de la mesa de diálogo en la Municipalidad. Como consecuencia del desalojo, dos delegados fueron detenidos y trasladados la comisaría 5ª de La Cañada. La Ilglesia anunció que «intercederemos por ellos a través de la ‘Casa de la Justicia’ para que se respeten sus derechos constitucionales».
Perfecto!!! Que los saquen, tres meses sin poder transitar por la avenida, y si querías pasar te robaban. Los vecinos que trabajamos y pagamos nuestros impuestos también tenemos derechos y no cortamos calles. Que el Arzobispado de Quilmes se los lleve a la Catedral, si hubieran tomado la Av Irigoyen seguro los sacaban al otro día. No los queremos mas !!!!