Tras conocerse el caso de una niña mordida por una serpiente en San Isidro, se encendió la alarma en la zona ribereña del Río de la Plata por la aparición de animales resultarían peligrosos para la salud. Sin embargo, el subsecretario de Medio Ambiente Alberto Chaia aseguró que sólo el 2% de los ofidios son venenosos en el distrito.
A poco de que comience una nueva temporada de verano en la Ribera de Quilmes, desde el municipio desestimaron que la presencia de especies no autóctonas revistan peligro para los visitantes. “La mayoría de los ofidios que encontramos en la zona son culebras, digamos el 98%. El resto son víboras venenosas”, aseguró el funcionario.
En diálogo con El Termómetro, sostuvo que “de todas maneras hay que estar prevenidos” y anunció que colocarán carteles informativos. También planteó que “sería un caso excepcional” que pueda aparecer un yacaré. “Lo que pedimos es que no traten de cazarlas. Ese es el problema que tuvimos en el verano”, manifestó.
Por otra parte, Chaia se refirió a los posibles casos de dengue en el municipio e indicó que ya se están haciendo fumigaciones pero que también apuntan a “un plan de prevención y educación para que no haya producción de mosquitos”.
Y agregó: “El problema más crítico es en los lugares donde se puede reproducir el mosquito. Si evitamos dejar lugares donde el vector se reproduzca, va a ser menos complicado. La única manera de frenar esto es evitar la proliferación del mosquito”.