Con un fuerte acompañamiento de las organizaciones sociales, el Concejo Deliberante de Avellaneda convirtió en ordenanza el proyecto para la creación de un Fondo de Asistencia Alimentaria. Salió con los votos solo del oficialismo y hubo cruces con la oposición. La sesión se calentó con el discurso del concejal de La Libertad Avanza, Arnaldo Díaz, y la referenta de Libres del Sur le recordó su pasado peronista.
La ordenanza crea un fondo especial que estará a cargo del Observatorio de Políticas Públicas municipal. Tendrá un presupuesto de 1.200 millones de peso, con único fin de la compra de alimentos y piden que se priorice las empresas, pymes y emprendedores de agricultura familiar del distrito como proveedores.
Distintas organizaciones sociales movilizaron y se hicieron presentes en el recinto para acompañar la ordenanza. Aunque mostraron alguna confusión celebrando que se aprobaba una emergencia alimentaria que no se declaró.
El bloque de Juntos por el Cambio se abstuvo en la votación, pero aclaró que acompañaría si se incorporan mecanismos de control, en una mesa de trabajo conjunta y la presentación de un informe mensual al cual el oficialismo no accedió. Posteriormente, José Alessi, aclaró que el HCD ya cuenta con los mecanismos de control.
Dos concejales del bloque denunciaron la entrega de alimentos en mal estado a escuelas a través del servicio del SAE en 2023 y se quejaron por un pedido de informes aprobado que no recibió respuestas del ejecutivo, los mecanismos de control que ofrece el oficialismo. Mientras que Damian Paz (PRO) consideró que la ordenanza es redundante y que solo le pone nombre a un paquete de recursos que el ejecutivo ya podía mover para adquirir alimentos.
Cesar Ríos (UxP) fue uno de los encargados de defender la propuesta y contó de la situación de Azul, el barrio donde vive: «hay gente que tiene trabajo y hace fila en los comedores para tener algo que comer ese día». Por su parte, Andrea Basile criticó a la oposición «nos quieren venir a enseñar si cuando gobernaron siempre lo hicieron mal». Mientras que el discurso más sentido fue el de María Alva González, dirigenta del Frente Patria Grande e impulsora del proyecto que denunció la situación del gobierno nacional: «El hambre no es un curro», planteó.
El momento más tenso de la jornada lo protagonizó Arnaldo ‘Pepo’ Díaz, el referente de La Libertad Avanza. Comenzó conciliador señalado que entiende que «la situación es delicada», pero luego repitió el discurso del gobierno nacional, habló de discrecionalidad en los comedores, de irregularidades en la compra de alimentos y en los planes sociales. Su discurso molestó a varios de los que estaban en los balcones del recinto.
Luego de la votación le dieron la palabra a Norma Morales, referenta de Libres del Sur Avellaneda y secretaria adjunta de la CTEP, y aprovechó a contestarle a Díaz. Le recordó su pasado ligado al peronismo, contó que comenzaron a militar juntos y le reclamó por la situación de hambre que se vive en el barrio de la familia de Díaz. Asimismo tuvo un mensaje para el oficialismo y pidió una autocrítica de «los gobiernos nacionales y populares». Cuando se retiró se saludaron con Díaz con un tibió apretón de manos.