La suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias apareció en el panorama electoral nacional como la única estrategia visible del Frente de Todos para enfrentar los comicios presidenciales 2023 y tener chances de aspirar a llegar a una segunda vuelta, en medio de la crisis económica que no da tregua. A nivel provincial también podría beneficiar al peronismo, pero el debate se da en los pasillos subterráneos del poder. La oposición se muestra casi en unidad en contra de la propuesta pero pide debatir el sistema de internas abiertas a futuro. Desde la Gobernación esperan la reacción del Congreso antes de accionar.
La idea la empujan los Gobernadores, mientras el Presidente Alberto Fernández se ha mantenido al margen. Bajo el argumento de “ahorrar” recursos, en medio de la crisis, la propuesta es “suspender por única vez” las PASO y que las Alianzas diriman sus candidatos en internas partidarias. La propuesta mostró ya el acompañamiento de algunas fuerzas provinciales con los que el oficialismo debe negociar en el Congreso pero sostiene una enorme resistencia de Juntos por el Cambio, hoy el espacio mejor posicionado para acceder al gobierno el año que viene.
Desde la Provincia de Buenos Aires ven a la distancia el debate mientras analizan las mejores opciones. Lo empujan los Intendentes quienes quieren evitar tener conflicto en sus distrito. Mucho se los acusa a los Jefes Comunales peronistas del Conurbano de estar operando la suspensión, pero los mandatarios radicales tampoco estarían en contra de evitarse una interna en caso que Juntos no pueda llegar a un acuerdo previo.
Mientras la discusión avanza en el Congreso las conversaciones comenzaron en La Plata para conocer cómo moverse. Aunque las PASO se suspendan a nivel nacional rigen por Ley en la Provincia, con lo cual habría que suspenderlas allí también. Sería una tarea titánica para el Frente de Todos juntar los votos en la Legislatura. Acá el costo vuelve a ser un argumento.
Si en Nación se suspenden las primarias, la Provincia de Buenos Aires debería organizar, coordinar y sustentar los comicios de internas abiertas, algo que el Gobierno bonaerense no ha hecho nunca. Este es el mejor argumento para conseguir el apoyo que falta, si el debate llega a la Legislatura. La administración provincial debería desembolsar una enorme suma de recursos que hoy no están contemplados y que el oficialismo dice que tendría que salir de los fondos que van a los municipios.
Será muy difícil para el peronismo unir voluntades detrás de este tema. En el PJ hay duras, el Frente Renovador se muestra entusiasmado y señala que las PASO «son un gasto 22.500 millones de pesos», como planteó Rubén Eslaiman, quien también cree que el Gobierno bonaerense debería desdoblar los comicios. En tanto, las organizaciones sociales como el Movimiento Evita piden sostenerlas.
En la oposición, la postura parece unificada. El diputado nacional Diego Santilli fue consultado por El Termómetro, en el marco de una actividad en Lomas de Zamora y calificó la posibilidad de suspender la primaria como una “mala idea”: “Me parece algo positivo que se pueda dirimir quien conduce en una primaria abierta y lo sano es tener PASO”.
Más duro fue el Jefe Comunal de Lanús, Néstor Grindetti, quien planteó: “Una vez más el oficialismo busca correr el arco cuando está por arrancar el partido, yo soy partidario de analizar una modificación integral y profunda a la ley electoral en la provincia de Buenos Aires pero eso lleva tiempo, no debemos analizarlo a menos de un año del próximo proceso electoral sino a futuro que incluya la boleta única, desdoblamiento , ficha limpia y una serie de propuestas que hacen a la transparencia de los comicios”.
Desde el Frente de Izquierda plantearon también su distancia de la propuesta peronista: “Somos críticos de las PASO porque plantean una forma de intermediación donde juega el Estado, donde las condiciones no son iguales para todos, nosotros creemos que cada partido debe poder elegir sus candidatos con los métodos que considere”, explicó a El Termómetro el diputado bonaerense del PO, Guillermo Kane, pero aclaró: “Dicho esto, hay un sistema electoral y que el gobierno de turno quiera modificarlo porque le conviene es una manipulación con la que no podemos estar de acuerdo”.
Y también los liberales están en contra de la suspensión. El legislador bonaerense Guillermo Castello explicó a este medio: “Estoy en contra del sistema porque se mete en la organización interna de los partidos, es caro y alarga enormemente el proceso electoral y la mayoría de los partidos no resuelve nada. Ahora bien, pero menos me parece modificar el calendario electoral a menos de un año. El kirchnerismo tiene un interés propio. Es oportunismo. Si podemos derogar las PASO desde 2025”.