Mientras se acortan los tiempos legales para modificar el cronograma electoral, el Gobierno sigue inmerso en una disyuntiva que se autogeneró. En diciembre pasado un grupo de Gobernadores pidieron suspender, por única vez, las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, en el marco de la pandemia de Coronavirus. Si bien la iniciativa tuvo buena recepción en Casa Rosada no fue lo mismo en otros sectores del Frente de Todos. Sin margen para el debate público, la iniciativa que trascendió los últimos días de posponer la fecha de las internas en base a los números sanitarios toma fuerza dentro del oficialismo como la opción más viable. Las distintas posiciones y la negativa de Juntos por el Cambio, la principal fuerza opositora.
La discusión lleva dos meses, sin llegar a una resolución. La abrieron un grupo de Gobernadores norteños en un almuerzo con el Presidente de la Nación, Alberto Fernández a principios de diciembre. Tras el encuentro, 21 mandatarios provinciales firmaron un documento en el que formalizaron el pedido. A través de sus legisladores enviaron un proyecto al Congreso para hacerlo de forma legal, pero la iniciativa avalada por Casa Rosada se topó con una resistencia interna: el kirchnernismo no quiere perder la herramienta electoral que gestó Néstor Kirchner ni la presión que puede ejercer una interna sobre los intendentes del Conurbano.
A pesar de sus diferencias, Fernández permitió el tratamiento del proyecto al incluirlo en extraordinarias, pero sin consenso con la oposición no tiene los votos para sacarlo. Así surgió una nueva estrategia: mover la fecha de las primarias.
Esta alternativa trascendió luego de un encuentro en Casa de Gobierno, el pasado jueves, entre el presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el jefe del bloque de de Diputados del Frente de Todos, Máximo Kirchner, y el ministro del Interior Eduardo ‘Wado’ de Pedro.
La idea aunó algunas posiciones. El que primero salió a hacer pública su posición fue Massa. El último fin de semana ofreció una entrevista donde se despachó sobre el tema. El Presidente de la Cámara de Diputados pidió » encontrar una forma de resolverlo de manera inteligente, con diálogo y sin mezquindad»; al tiempo que sostuvo que «desde lo operativo es muy inteligente votar un solo día lo que sea primario y general”.
La Cámpora y el Kirchnerismo suman a la idea de realizar las dos elecciones en un día. Asimismo, la posibilidad de correr las primarias un mes. Si los indicadores sanitarios se repiten agosto podría ser uno de los meses más complicados del año en cuanto a contagios, y a pesar que desde el Gobierno asumen que la vacunación estará avanzada, la inmunidad de rebaño podría no estar asegurada. Septiembre aparece como un mes más cómodo. Lo principal será garantizar la posibilidad de presentar alternativas en distritos del Conurbano donde la organización tiene aspiraciones de gobernar desde 2023.
Así la propuesta sería retrasar la primaria del segundo domingo de agosto (como está prevista hoy) al último domingo de septiembre, y en el caso de la elección general aplazarla del cuarto domingo de octubre (como deberá realizarse si no hay modificaciones) al mes de noviembre. Cualquier modificación deberá ser aprobada por el Congreso.
Con dudas entre los propios, el principal frente opositor, Juntos por el Cambio, se mostró reacio a cualquier tipo de modificación del calendario electoral. Sin embargo, una modificación en las fechas podría llegar a tener consenso: «Estamos en contra de suspender las PASO y de la instauración de una ley de Lemas. Cualquier otra propuesta, como correr las fechas 20 o 30 días por criterios epidemiológicos, la vamos a escuchar», publicó en sus redes el diputado radical Mario Negri, Aún así se opuso terminantemente a realizar las dos elecciones el mismo día».
Que no se les ocurra juntar en un mismo día las PASO con las elecciones generales. Porque es obvio que quieren que la oposición se atomice, no quieren otra cosa. Pero nosotros sabemos jugar a las bochas, no lo vamos a aceptar. El oficialismo no es dueño de la ley electoral. pic.twitter.com/A3VQrQkwJ0
— Mario Raúl Negri (@marioraulnegri) February 8, 2021
Al Gobierno se le acortan los tiempos, debería tener una definición en marzo, previo a la confección del cronograma electoral, hoy no tiene ni los votos ni el consenso. El panorama sanitario es dudoso y un mal paso podría dejar expuesto al Ejecutivo.