A pocos días del tratamiento de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) en la Cámara de Diputados, el obispo Carlos Tissera tuvo fuertes palabras apuntando hacia los que “vociferan contra el aborto” y “no mueven un dedo para estar junto a las madres que viven su embarazo en situaciones de pobreza”.
Lo dijo en el marco de la celebración de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, que se llevó adelante este martes en la Catedral de Quilmes, la cual fue trasmitida a través de las redes sociales. En su homilía, el titular de la Diócesis indicó que “como Iglesia no queremos descartar a nadie. Sólo queremos incluir e integrar toda vida”.
Y agregó: “A lo largo de la pandemia particularmente, nuestra Iglesia de Quilmes, sobre todo a través de Cáritas y el trabajo en red, hemos acompañado a las familias en sus necesidades básicas. Caritas es como la sangre que es la primera en acudir donde hay una herida. Siempre estará junto a una madre que sufre, sin juzgar el porqué de su dolor”.
A su vez, Tissera hizo un “llamado a tomar conciencia” a poco de la discusión de la ley para legalizar el aborto en el país. Con una dura mirada, el Monseñor sostuvo que “si nos causa pena una posible ley del aborto, igual dolor nos provoca ver a cristianos que defienden la vida por nacer y se olvidan de la vida ya nacida”.
Según el obispo, de esa manera se “deshonran la dignidad de los pobres apoyando políticas de despojo de derechos a los más pobres”. Al mismo tiempo que apuntó contra los que “vociferan contra el aborto y no mueven un dedo para estar junto a las madres que viven su embarazo en situaciones de pobreza, descarte o explotación”. Y cerró: “También nos causa pena que se invoca la fe cristiana para defender escandalosas desigualdades sociales”.