A más de cuatro meses de iniciadas las medidas de aislamiento, la ocupación de las camas en los hospitales de la Provincia crece en línea con el avance de la pandemia y preocupa cada vez más la posibilidad de llegar al colapso. Además de la falta de espacio físico, el otro problema que enfrenta el sistema de salud radica en la reducción en la cantidad de personal que puede asistir a los pacientes debido a que son parte del grupo donde se registran mayores niveles de contagios.
“La situación es preocupante porque creció el número de casos y el de las camas críticas ocupadas, en particular en el Conurbano. Recogimos información de la semana pasada y observamos un porcentaje de ocupación alta en la mayoría de los hospitales, que en algunos está llegando al 100 por ciento”, expresó en diálogo con El Termómetro el vicepresidente la Asociación de Profesionales de la Salud de la Provincia (CICOP), Fernando Corsiglia.
Entre los centros de salud de la zona que están más complicados, mencionó, se encuentran el hospital Evita de Lanús y el Iriarte de Quilmes.
Por otra parte, según los datos que releva la entidad sindical, hasta el momento hay 7580 los trabajadores en los hospitales bonaerenses. La cuestión se centra en que se trata de “personal no reemplazable porque el decir de recursos humanos viene de larga data”.
“Quienes están más expuestos son los que más se contagian, que están en terapia en las camas críticas”, agregó el médico.
En ese sentido, reparó en que la escasez de recursos humanos viene de larga data, la situación actual la complicó el panorama. No obstante, a pesar de los esfuerzos por sumar más trabajadores, “fue insuficiente”.
“Insistimos al gobierno en que una de las cosas que no cumplió es la apertura paritaria y eso tiene directa relación con no conseguir personal. En la Provincia tenemos eso en tener salarios tan bajos y condiciones de trabajo desfavorables”, remarcó y señaló que están a la espera de alguna comunicación oficial.
Ante este escenario, insistió en la preocupación que existe “por la persistencia en los contagios” y la afectación del personal del sector. Sin embargo, pese a que evaluó necesario implementar medidas para bajar la circulación, resaltó que deben poder ser “cumplibles” por parte de la población.
“Es una situación muy crítica y estamos muy preocupados porque hay una ocupación muy alta en el sistema de salud. El sector medio de la población le ha perdido el miedo a la enfermedad y el problema es que repercute en los mayores», expresó.