En un contexto sanitario crítico, la dirigente del Frente de Izquierda de Quilmes Carla Lacorte se refirió al aislamiento de Vila Azul y criticó el accionar tardío de las autoridades municipales y provinciales ante una situación que “se veía venir”, tanto por la falta de agua como por el hacinamiento en el que viven las familias y por la fuerte presencia de las fuerzas de seguridad en el lugar.
“Aislaron un barrio que venía ya pidiendo por agua hacia semanas en medio de una pandemia donde lo mínimo que se necesitaba es eso. Llegaron tarde a hacer una especie de encuesta, porque los test eran para quienes tenían síntomas, testeaban a una persona y dejaban a todas las otras personas sin testear en la misma casa, que podían ser asintomáticos y seguir contagiando”, expresó en diálogo con El Termómetro.
Más allá del escenario particular de esta zona compartida entre Quilmes y Avellaneda, la referente del PTS señaló que en el distrito que gobierna Mayra Mendoza “el 25% de la población vive en villas y asentamientos” y reparó en que muchos necesitan salir a trabajar aún en estas circunstancias “porque no les llegó el Ingreso Familiar de Emergencia”.
“Nosotros planteamos también que hubiera un salario de pandemia, de 30 mil pesos, para cubrir el salario de mucha gente, porque no pueden cubrir una situación tan extrema con 10 mil pesos. Si la gente sigue transitando la pandemia en esta situación, se va a seguir contagiando”, expresó.
En esa línea, cuestionó la decisión del gobierno municipal, según la cual “lo primero que hizo fue sitiar Azul” en lugar de realizar más pruebas del estado de salud. “Hicieron 200 testeos y llevaron 900 policías, así encaró la emergencia la intendenta, el gobernador y la presidencia. Llevaron a (el ministro de Seguridad, Sergio) Berni y no al Ministro de Salud”, agregó.
Por otra parte, Lacorte se refirió a la presentación que hizo la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) pidió la clausura de la comisaría de La Cañada debido a la sobrepoblación que allí impera, una característica que se repite en muchas dependencias policiales.
“Hablamos muchas veces del historial de esa comisaria, con abusos terribles. No pueden estar 22 personas en una comisaria, como están ahí, en la situación en la que estamos”, manifestó y recordó que “el 60% de la población carcelaria está detenida sin tener condena”.