Después del brote de contagios en Villa Azul, barrio popular que forma parte de los municipios de Quilmes y Avellaneda, quedaron en evidencia las diferencias existentes entre ambos lados, apenas separados por una calle. Armando Bertolotto, concejal de Avellaneda por el Frente de Todos habló con El Termómetro y se refirió a este tema y apuntó directamente contra Martiniano Molina.
“En Villa Azul si vos ves las fotos aéreas de lo que es el barrio del lado de Avellaneda el Municipio hizo todas las cosas se tenían que hacer. Con la ayuda de Nación y de Provincia, en los últimos seis años se hicieron viviendas nuevas, polideportivos y hasta un natatorio. Lo que pasa es que cruzando la calle, del lado de Quilmes, me parece que el anterior Intendente solo sabía hacer papa soufflé, porque no hicieron nada”, disparó Bertolotto quien además manifestó su preocupación por la aparición de más casos positivos en Villa Itatí.
En este sentido también hizo mención a la situación del resto de los asentamientos del distrito y al riesgo que implica estar en el límite de dos zonas complicadas como lo son Quilmes y CABA : “El tema está muy focalizado. Los focos hoy están en Villa Tranquila, en la de cercanía a Dock Sud y la Isla Maciel. El 90 % de los contagios están ahí. El resto está bastante controlado. Y si somos un lugar de riesgo no es solamente por el sándwich entre Capital y Quilmes, sino porque somos un lugar de paso. Por Avellaneda circulan un millón de personas por día que vienen de otros distritos por las diferentes vías de acceso que tenemos”, sostuvo.
Además, detalló cómo es el panorama en Villa Inflamable, otro punto sensible de Avellaneda: “ El problema en Villa inflamable es algo histórico que iba a resolverse pero que por el freno del envío de fondos se paralizaron las obras. Es terrible la situación ahí. Está todo contaminado”.
Por otro lado confirmó que el Honorable Concejo Deliberante de Avellaneda tratará en la próxima sesión- que tendrá lugar el segundo jueves de junio- la rendición de cuentas 2019.