Por cábala, como en 2015 y en 2017, María Eugenia Vidal acompañó a Néstor Grindetti en el cierre de campaña de Lanús en el club Quintana. La Mandataria pidió escuchar y revisar los errores: «, una política equivocada se puede corregir, lo que no se puede corregir es como uno es y nosotros somos coherentes».
Juntos por el Cambio de Lanús cerró su campaña a cuatro días de las elecciones con un encuentro para dirigentes y fiscales. Grindetti contó, agradecido, que, desde las PASO, se sumaron 500 voluntarios a participar de la fiscalización y apuntan a que con un mejor trabajo puedan recuperar algunos puntos perdidos.
«Quiero pedirles a los fiscales que estén atentos el domingo. Si todos hacemos lo que tenemos que hacer, el domingo ganamos y estamos cuatro años mas al frente del municipio», les aseguró Adrián Urreli, diputado provincial y jefe de la campaña del actual Intendente. Además, previo al cierre hablaron la senadora Lorena Petrovich y Diego Kravetz, quien estiró todo lo posible a la espera de la Gobernadora de la Provincia.
Muy corto y sin explayarse, Grindetti pidió «dejar todo en la cancha el próximo domingo, no nos ahorremos un mínimo de esfuerzo, no dejemos que nos roben la ilusión, este cambio que empezó en Lanus no puede detenerse» y dio lugar a María Eugenia Vidal.
El lugar elegido no fue casualidad. El club Quintana había sido el elegido para el cierre de campaña de, la entonces, candidata a gobernadora por Cambiemos en 2015. Eso marcaría una pauta a repetir. En 2017 Vidal eligió otra vez Lanús y en la provincia Esteban Bullrich le ganó a Cristina Fernández de Kirchner al senado. Pero para esta elección el cierre será el jueves en Vicente López (donde manda el otro hombre fuerte del PRO en el conurbano, Jorge Macri), así que Vidal luego de pasar por Tigre y Lujan llegó hasta Lanús para acompañar a su «amigo» según describió.
La misma Gobernadora señaló la importancia del lugar: «muchas gracias por recibirme en este lugar donde estuvimos en el cierre 2015 y 2017. Tenia que ser en Lanús, no queria terminarla campaña sin venir a acompañar a Néstor», contó y en un mensaje que podría ser malinterpretado por otros jefes comunales lo elogió: «si hay un intendente que se merece el voto y el acompañamiento de sus vecinos es Grindetti».
«No lo digo porque es mi amigo y lo quiero. Cuando yo recién elegía la provincia para vivir, el ya queria ser intendente, lo hablamos y me dijo ‘yo elijo ese lugar, donde me crié, es mi lugar'», resaltó Vidal y contó que son parecidos porque «los dos elegimos porque nos gustan la peleas difíciles y porque compartimos los mismos valores».
En ese punto, la candidata a renovar su mandato por Juntos por el Cambio aclaró que para ella «la política se divide en dos, a los que les importa y a los que no. Y a nosotros nos importa». Así es que señaló una serie de obras e inversiones que llegaron a Lanús como «las obras contra las inundaciones que comenzamos con Néstor»; el SAME, las guardias de los hospitales, la iluminación led y «la pelea contra los narco que damos todos los días» porque «no nos da lo mismo hacer las cosas bien que mal».
Así y hablándole a los presentes, Vidal les pidió «no bajar los brazos, tenemos que dar la pelea” y agregó: «no somos de los que creen que el gobierno sabe todo, venimos a gobernar porque para nosotros el poder no es la oportunidad de enriquecerse, el poder es la oportunidad de servir a la comunidad”.
En intento de diferenciación con Macri, la Gobernadora aseguró: «No nos enojamos con los que no nos votan, por el contrario los escuchamos para corregir, una política equivocada se puede corregir, lo que no se puede corregir es como uno es”, y cerró con una tarea para los militantes: «miren a los ojos a sus vecinos y dignale lo que ya sabemos, no es para atrás, es para adelante».