La dupla Kicillof-Magario arrasó en las PASO en la sección más populosa de Buenos Aires, donde se imponía con el 56,65%, cuando se llevaban escrutadas el 85% de las mesas. La gobernadora María Eugenia Vidal quedó muy por detrás y apenas conseguía 25%, unos siete puntos por debajo de lo que obtuvo en toda la provincia. Los nueve senadores se dividirían entre ambas fuerzas.
La tercera sección electoral, sinónimo de conurbano, es sin duda la más importante dentro de la provincia. El voto peronista siempre estuvo arraigado en los votantes. Sin embargo, el fuerte impacto que tuvo la crisis en sus habitantes produjo un fuerte rechazo al gobierno nacional y provincial que se vio reflejado en los números de las elecciones.
Mientras en toda la provincia, el Frente de Todos se impuso con el 49,23%, en la tercera ese número asciende al 56,65%. Por contrapartida, Juntos por el Cambio logró el 32,25% de los votos en el territorio bonaerense, pero apenas superó los 25 puntos en la sección que comprende municipios importantes como La Matanza, Lomas de Zamora, Quilmes, Almirante Brown, Avellaneda, Lanús, Berazategui y Florencio Varela, entre otros.
La polarización fue tal que sólo cuatro espacios pudieron alcanzar el piso del 1,5%, ya que Consenso Federal sacó 5,81% y el Frente de Izquierda consiguió 3,49%. Después se colocó el Frente NOS de Juan José Gómez Centurión que se quedó con el 1,48%.
De esta manera, Axel Kicillof logró conseguir más del doble de los votos de María Eugenia Vidal para marcar nuevamente la cancha que la tercera sección continúa siendo un territorio peronista. De mantenerse este esquema en octubre, Todos ingresaría seis senadores bonaerenses y Juntos por el Cambio, tres.