Marcelo Lencina fue capturado en la tarde del miércoles en las inmediaciones de la estación de Bernal, luego de realizar varios allanamientos en viviendas relacionadas con el sujeto. La orden fue realizada por la UFI N° 8 tras haber sido liberado pese a haber sido identificado por Florencia Saucedo, la nena de 14 años.
El episodio ocurrió en la madrugada del domingo, cuando la chica pidió un remis para volver a su casa. “Era de confianza, como todo remisero del barrio, siempre viajaba con él. Pero la llevó y tomó otro camino”, había relatado Claudia, la abuela de la menor.
En primer término, la fiscal María Eugenia Aparicio, quien se encontraba reemplazando al doctor Alejandro Ruggeri -titular de la Unidad Funcional de Instrucción N° 8-, liberó al hombre, situación que desencadenó una serie de protestas y escraches frente a su vivienda de la calle Otamendi, en la Ribera de Quilmes.
Tras cuatro días del episodio, la Justicia finalmente ordenó una serie de operativos para dar con Lencina. A partir de ahí, efectivos de la comisaría 1ª allanaron la casa sin tener resultados positivos. También se dirigieron a la propiedad de una de las hijas. Finalmente, el sujeto de 24 años fue capturado en la estación de Bernal.
Para llevar adelante la acción, la Policía efectuó un operativo cerrojo en el que se logró la aprehensión, más allá de su intento por darse a la fuga. La causa quedó caratulada como “abuso sexual por acceso carnal”.