Integrantes del Centro de Panaderos de Avellaneda denunciaron que recibieron una serie de amenazas y vincularon lo sucedido con su actividad sindical y a sus intenciones de pelear por la conducción nacional del gremio, que ahora encabeza Abel Frutos. Si bien todavía no tienen pruebas concretas, aseguran que las agresiones provienen desde allí.
“Ayer nos presentamos en la sede y cuando arribamos nos encontramos con un papel que tenía la amenaza escrita, después mi compañero percibe que había un impacto de bala en la puerta. Tenemos la certeza de que fue gente del sindicato porque hubo actitudes así hacia nosotros”, relató en diálogo con El Termómetro el titular de la seccional avellanedense, Gastón Mora.
El episodio, aseguran, es consecuencia de la intención del grupo de pelear el liderazgo de la entidad sindical y del “vínculo político” que existe entre el secretario general con Cambiemos ya que incluso “su hijo (Gabriel Frutos) fue candidato en la lista de Gladys González”.
En la misma sintonía, respecto a la conexión con el oficialismo, Moro reparó en que “el sector panadero perdió 7200 puestos de trabajo y el gremio no hizo nada para defender la industria”. Además, mencionó que Frutos “tiene varias denuncias por malversación de fondos”.
En ese sentido y frente a este panorama, insistió en que tienen “claras intenciones de competir a nivel nacional”. Pese a que las elecciones serán en dos años, creen que la seguidilla de denuncias debería derivar en una intervención del sindicato y el consecuente llamado a elecciones.
“Apelamos a que la justicia resuelva, pero no nos vamos a quedar quietos. Defendemos los intereses de os trabajadores y esto no nos intimida: están los mismos hace 25 años y creemos que es tiempo de un recambio generacional”, sentenció.