Una mujer de 57 años cuyo estado de salud es por demás delicado se encuentra internada en pésimas condiciones en el hospital Mi Pueblo de Florencio Varela. Según denunció públicamente su hija, la mujer es paciente del nosocomio desde el pasado 24 de septiembre cuando ingresó con un cuadro de neumonía. Sin embargo, apenas un día después fue inducida en un coma farmacológico sin dar aviso a los familiares respecto a qué había pasado.
“Durante 3 días intentamos ponernos en contacto con el jefe de guardia, luego de varios intentos nos atendió y nos explicó que debido al colapso del sistema de salud no era posible trasladarla a un hospital de alta complejidad y tampoco había camas disponibles en terapia intensiva”, contó Micaela.
La paciente, que es discapacitada motriz luego de un grave cuadro de diabetes, permaneció 35 días en terapia intensiva y luego fue dada de alta, pero a la semana debió ser hospitalizada nuevamente, inducida en coma farmacológico y con respirador. Desde ese momento permanece acostada en el pasillo de la guardia del hospital «en estado de abandono», aseguraron sus familiares.
Los familiares solicitan el traslado urgente al hospital de alta complejidad El Cruce e incluso realizaron el reclamo ante la Defensorìa del Pueblo Local. Allí les manifestaron que “el lugar es nuevo y no tuvieron un caso similar”, por lo que “no saben cómo actuar”. “Podemos realizar el pedido, pero no creo que pase nada”, asegura que le dijeron.
“La están dejando morir en una camilla de guardia, no nos dan un diagnóstico, no le dan los cuidados correspondientes sabiendo que tiene escaras y que corre un serio riesgo de sufrir la amputación de sus piernas ya que tiene todas las arterias tapadas”, sostuvo la mujer y agregó: “entendemos que la decisión de dejarla morir en la guardia es porque somos pobres. ¿Si una persona no tiene obra social tiene que morir como un perro tirada en la camilla de una guardia?.