La Escuela EP 46 de Don Bosco, ubicada en la calle Chiclana entre Álvarez y Rivadavia, sufrió la explosión de un caloventor. Las clases fueron suspendidas en forma indefinida por los graves problemas de infraestructura que siguen sin solución. Ya se han perdido decenas de días de clase por esta situación, y mientras hubo, tanto el personal como los niños y niñas, estuvieron en peligro. Denuncian que en todo este tiempo no se acercaron a la escuela ni las autoridades del Consejo ni de la inspección, dejando desamparados a directivos, docentes y auxiliares.
El motivo de la explosión fue la sobrecarga de una instalación eléctrica que está colapsada y se corta todo el tiempo. Como si todo esto fuera poco, la escuela no tiene gas hace años, ya que fue cortado prometiendo la construcción de un nuevo edificio. Este quedó sin terminar, y los problemas de la escuela se agravan sin solución. Sin gas de red, se cocina con garrafa. Sin gas de red, se usan caloventores precarios que revientan la instalación eléctrica. Sin luz, no hay agua. Los papás y mamas de la escuela aseguran que así no se puede ni estudiar ni trabajar.
Los padres de los alumnos que concurren al establecimiento, así como docentes y gremios piden que el Concesejo Escolar y el gobierno arreglen la escuela para que tenga condiciones dignas y seguras de forma urgente y que se liberen los fondos para terminar el edificio nueva, que es la verdadera solución a los problemas.