Oscar Centeno, el ex chofer del funcionario Roberto Baratta, mano derecha de Julio de Vido en el ministerio de Planificación durante la gestión kirchnerista, se desempeñó como empleado municipal en la administración de Patricio Mussi hasta este miércoles, cuando el intendente de Berazategui lo despidió.
Según la investigación del periodista de La Nación Diego Cabot, Centeno registró en ocho cuadernos los recorridos que realizaba con Baratta a través de las diferentes empresas contratistas del Estado en donde se recolectaban bolsos llenos de millones de dólares. “Tomó las direcciones, los nombres, los montos y las características físicas de quienes no conocía. Hasta llegó a anotar el peso de los bolsos o las valijas”, detalla el periodista.
Al ser detenido, Patricio Mussi decidió despedirlo argumentando que se ausentó a su trabajo. «Tenía una designación temporaria desde el 27 de octubre de 2017 y en esa condición se puede interrumpir el contrato por ausencia», explicaron desde el Municipio a La Nación.
Además, agregaron que «no tenía un área designada como chofer, sino que su tarea dependía del día. Incluso, es probable que más de una vez le haya tocado trabajar en la recolección de residuos».
No extraña que Centeno haya ido a parar bajo el ala de los Mussi teniendo en cuenta la cercanía que tuvieron con Julio De Vido durante los últimos años de la gestión kirchnerista.
En 2014, y pensando en la elección de 2015, Mussi conformó “Los Oktubres” junto a otros intendentes de la Provincia bajo el ala protectora del ex ministro de planificación. Desde allí, Mussi aspiraba a una candidatura para competir como Gobernador aunque sus deseos se desvanecieron en el camino.
Durante años las obras proliferaron en Berazategui gracias a la buena sintonía que tuvieron con uno de los Ministros más poderosos de la era K. Hoy, los Mussi son fuertemente cuestionados en privado por el kirchnerismo duro quienes ven al cacique de Berazategui negociando con Vidal y cercano al peronismo tradicional.